"Este meme de Slender Man me recuerda a una historia que platicaba mi abuela (a quien solíamos llamar 'abuelita pequeña', pues era similar a Yoda) sobre un monstruo llamado Largo Jack. Sé que Slender Man empezó como un photoshop en Something Awful, pero ciertas imágenes y aspectos de él me recuerdan a esa vieja historia.
Debo decir que no escuché la historia original en sí, pues cuando era pequeño viví por un tiempo en casa de mi abuela mientras mis padres arreglaban su divorcio. Mi bisabuela vivía en el mismo camino, y como la luz eléctrica se iba constantemente durante las tormentas de invierno en esos días; abuelita pequeña venía y nos contaba historias frente a la chimenea.
Yo tenía cuatro o cinco años, así que abuelita solo contaba esa historia del Largo Jack una vez que me había ido a dormir. Así que fueron mis hermanos mayores y primos quienes me la contaban.
Abuelita pequeña decía que era una niña cuando sus padres migraron al oeste.
Hay incluso una vieja fotografía de ella cuando era niña, de pie con el resto de su clase frente a una escuela hecha completamente de troncos. Hay árboles grandes y viejos tras ellos, y muchas sombras oscuras y tenebrosas entre la vegetación.
El Largo Jack, sea lo que sea hoy, fue originalmente una persona. No sé su nombre real. En ese tiempo, las familias vivían en los bosques, alejadas entre sí por millas y millas; pero había una gran migración de personas que iban y venían: colonos, leñadores, mineros de camino a la fiebre del oro, etc...
No había hoteles fuera de las grandes ciudades, y si dormías aquí, era en tu campamento o en casa de un colono que te permitía pasar la noche ahí. Me imagino que el crimen violento no era algo cotidiano entonces, o quizás la gente era más inocente; pero el tipo que se convertiría en el Largo Jack definitivamente era un asesino.
Hubo un montón de asesinatos en la región: familias enteras masacradas. A veces se culpaba a los nativos americanos, pues aún había una guerra entre ellos y los pobladores; pero no había indicios de batallas o que alguien forzara las puertas de las casas. Siempre parecía que las familias habían invitado a dormir a alguien que los asesinaba durante la noche.
No había forma de atraparlos rápidamente, y no sé si el Largo Jack fue quien los mató a todos. Pero mató por lo menos a una familia, y ahí fue donde lo atraparon. En Bellingham. De donde es mi familia.
Por lo regular se linchaba a los criminales en ese entonces, pero en el Noroeste del Pacífico rara vez se linchaba a un blanco, casi siempre se trataba de chinos o indios. El sheriff local, John Larrabee, temía que la población se rebelara por matar a un hombre blanco; así que sacó al Largo Jack por la noche y lo llevó a unos riscos al sur del pueblo. Se construyó una horca rudimentaria con una cuerda muy larga, con la intención de colgar al criminal del risco.
El verdugo ese día fue un excéntrico local llamado Dan Harris, a quien se eligió porque era un marino retirado que sabía todo sobre nudos. Se ofreció como voluntario, pues había trabajado como ballenero y tenía un fascinación mórbida con la carne y como 'desarmar' un cuerpo y destrozarlo. Si la gente lo hubiera sabido, quizás no se le habría elegido para dicho trabajo.
Harris no se conformó con poner una cuerda alrededor del hombre a ser ejecutado. En realidad hizo muchos nudos con cuerdas que fueron atadas a los dedos, y con una pesa de plomo al final del otro extremo de cada una.
En cada muñeca se ataron más cuerdas con piedras pesadas. En cada tobillo había cuerdas atadas a rocas. La gente observó a Harris hacer esto, pero no sabían exactamente de qué se trataba. Incluso el mismo Larrabee ignoraba qué pasaría.
Llegó el momento en que debía colgarse al hombre, y entonces alguien lo empujó. El criminal cayó rápidamente por el precipicio, y todos escucharon atentos, esperando el crujido que haría el cuello al romperse; pero lo único que se podía oír era una cuenta. Harris contaba en voz baja.
1... 2... 3... 4...
Hubo un crujido fuerte, casi como un disparo. 7... 8... 9... 10... Otro. No fue el cuello. Fueron las piernas dislocándose de la cadera. 14... 15... 16... Más crujidos y 'pops'. Hombros, codos y talones... todos dislocados.
21... 22... 23... Los dedos, cada nudillo separándose con un sonido similar al de las palomitas de maíz. Los gruñidos del hombre aún podían oírse, pues todavía se encontraba vivo y consciente de lo ocurrido. 36... 37... 38... La voz de Harris volviéndose más fuerte mientras la gente observaba con horror.
Al llegar a 43, se escuchó un crujido ensordecedor. Se rompió la horca y el hombre, con todo y cuerdas y pesas; cayó por el risco. Su cuello y extremidades torcidos en ángulos imposibles. Y en la oscuridad, quienes pudieron percibir el cadáver al fondo del acantilado; se asquearon por la imagen que ofrecía: las extremidades habían sido alargadas, y ahora se confundían con las cuerdas en una especie de amasijo similar a un montón de bandas de goma. Era demasiado oscuro para recuperar el cuerpo, y para cuando las autoridades locales pudieron formar un grupo para ir por él; los animales ya se habían encargado de devorarlo.
Aquí es cuando mi abuela entra en escena.
Le solían contar que el fantasma del Largo Jack aparecía en los bosques, secuestrando a la gente que entraba en ellos. Decían que contaba cuando se acercaba por detrás.
1... 2.. 3... 4... Escuchó una vez, mientras caminaba de vuelta a casa de la escuela. 14... 15... 16... De acuerdo con la historia, no debías mirar hacia atrás o te capturaría. Tenías que correr lo más que pudieras, así que eso fue lo que hizo mi abuela.
21... 22... 23... El conteo siguió. Era como un susurro, pero que se hacía más y más fuerte; como si estuviera justo detrás de ella. 27... 28... Podía oír sus pisadas, un andar mucho más prolongado que el de cualquier adulto.
Por el ritmo, se dio cuenta de que las piernas eran imposiblemente largas. Sus brazos y piernas debían doblarse de manera sobrenatural. Alcanzó la puerta de su cabaña justo cuando el Largo Jack contaba hasta 37. Entonces se dio cuenta de que si el Largo Jack hubiese llegado a 43, ella habría muerto.
Hubo otros niños que se perdieron en los bosques en ese tiempo, y jamás fueron encontrados. Ningún adulto mencionaba al Largo Jack, pero mi abuela sabía que de eso se trataba.
Y esa es la historia del Largo Jack, como mi bisabuela la contaba; o al menos como mis primos y hermanos la narraban. No creo en fantasmas, pero me gustaba la historia. Tampoco he encontrado menciones de asesinos en los archivos locales, pero de nuevo, fue algo que no esperaba. Aunque ciertos nombres sí aparecen en los registros históricos.
39... 40... 41...