Un sub-género del horror particularmente popular entre los jóvenes, es aquél que muestra la existencia y el terror traído por la posesión de espíritus o entidades demoníacas en cosas tan inocentes e inofensivas como juguetes y muñecos.
Películas como la trilogía de Chucky, la saga Puppet Master y ¿Dolly Dearest, han perpetuado el miedo del público hacia la idea de un muñeco poseído por el alma de un asesino o un demonio; mientras que filmes como Poltergeist o Annabelle han creado la idea popular de que muchas veces los encuentros con lo sobrenatural pueden corromper los inocuos juguetes de los niños que habitan un hogar.
La verdad es que, en la vida real ha habido incontables historias de muñecos que han sido poseídos o han causado desgracias a lo largo de décadas; y que hacen ver a los ya mencionados Chucky y Annabelle como figuritas inofensivas. Nombres como Robert o Annabelle ya son conocidos entre los amantes del miedo y el misterio, mientras que otros como Pupa o los muñecos de Pennsylvania resultan completamente desconocidos pero no menos aterradores que los dos mencionados previamente.
Los diablitos de Nueva Orleans.
Del Bebé Demonio de Nueva Orleans ya se ha hablado en este blog, pero en esta ocasión se contará la historia de las réplicas que pueden encontrarse en la ciudad. Tras el pánico en masa producido por los encuentros con el Bebé Demonio, los habitantes de Nueva Orleans comenzaron a tallar muñecos con la figura del infernal ser, con la idea de atemorizarlo.
Algunos de estos muñecos existen hasta la fecha, pero son extremadamente raros y muy caros. Aunque a comienzos del siglo XX, empezaron a aparecer muñecos como el mostrado arriba; réplicas supuestamente "idénticas" al Bebé Demonio, al grado de que se dice están poseídos por espíritus oscuros o el Bebé Demonio mismo.
Quienes han comprado estos muñecos, mencionan que son malévolos, que siguen a las personas con la vista y a veces se mueven por sí solos. Cabe mencionar que estos juguetes vienen con advertencias al comprador, mencionando los sucesos sobrenaturales que pueden ocurrir si se les adquiere.
Elmo.
En el año 2008, la familia Bowman compró un muñeco de la marca "Elmo Sabe tu nombre", el cual podía ser programado para recitar el nombre de su dueño junto con algunas otras frases personalizadas. De manera perturbadora, Elmo no solo empezó a repetir el nombre del pequeño de dos años a quien se le compró, James, si no que había comenzado a cantar "¡Matar a James!"al cabo de unos días.
Cabe mencionar que el muñeco comenzó a lanzar amenazas de muerte luego de que se le cambiaran las baterías por primera vez, y que la empresa Fisher-Price le ofreció a los Bowman un vale para cambiar el muñeco por uno nuevo.
Okiku.
La historia de Okiku se remonta a 1918, cuando un joven de 17 años llamado Ekichi Suzuki compró la muñeca al visitar una exhibición marítima en la ciudad de Sapporo, Japón. Obtuvo la muñeca en la calle de Tanuki-koji, una popular avenida turística y de negocios en la ciudad; y se la regaló a su pequeña hermana de dos años llamada... Okiku.
La niña amaba la muñeca y jugaba con ella todos los días, hasta que al año siguiente murió víctima de un fuerte resfriado. Tras la muerte de Okiku, la familia Suzuki colocó la muñeca en un altar doméstico y comenzaron a rezarle cada día para pedir por el descanso eterno de la niña. Luego de un tiempo, los Suzuki se dieron cuenta de que el cabello de la muñeca comenzaba a crecer; cosa que tomaron como un signo de que el espíritu de la pequeña Okiku había tomado posesión del objeto.
Letta.
En 1972, Kerry Walton encontró una vieja marioneta oculta bajo el porche de un edificio abandonado. De acuerdo con psíquicos que han analizado el juguete, fue hecho doscientos años atrás por un gitano romaní, a la memoria de su hijo que había fallecido ahogado.
La tradición gitana menciona la idea de la transferencia de espíritus, y que los juguetes por lo usual actúan como receptáculos para las almas de los muertos. Letta tiene cabello humano verdadero, y en el interior de su cabeza hay una réplica en madera de un cerebro humano
Letta es capaz de producir toda clase de fenómenos: llueve cuando el muñeco es sacado al aire libre, hace caer los cuadros en las habitaciones a donde es movido, los perros se tornan agresivos en su presencia y es capaz de producir un sentimiento de tristeza en quienes lo ven. Se dice que Letta puede moverse por sí mismo, cambiando de posición durante la noche y que incluso tiene un "pulso", como si un corazón latiera dentro de él.
Los muñecos de la cámara.
Propiedad de una familia en Pennsylvania, Estados Unidos; este grupo de ocho muñecos está habitado por espíritus o entidades y es monitoreado constantemente por una cámara de vigilancia que transmite señales a internet.
Ocasionalmente, la señal de la cámara falla o registra extraños sucesos. Por ejemplo, en el año 2009 captó lo que parece ser la imagen de un niño pequeño al fondo de la escalera que conduce al ático de los muñecos.
Pupa.
Esta muñeca, que data de la década de 1920, fue hecha en Italia como réplica de su dueña, una niña de cinco años que habitaba la localidad de Trieste. Pupa sobrevivió la Segunda Guerra Mundial sin daño, e inclusive acompañó a su dueña cuando ésta migró a lo largo de Europa y a Estados Unidos durante los años siguientes al conflicto.
La muñeca fue donada a un museo luego del fallecimiento de su dueña en el 2005, y desde entonces ha sido objeto de varios sucesos paranormales. Se dice que su expresión cambia, que puede mostrar un gran rango de emociones y que se puede mover sola. A veces empuja objetos a su alrededor, y al parecer odia estar encerrada; pues tiende a golpear el cristal del exhibidor donde se encuentra. En más de una ocasión, personal del museo ha visto a la muñeca presionando su mano contra el vidrio, o con las piernas cruzadas.
La muñeca de Singapur.
Esta muñeca fue encontrada en una vía popular de Singapur, y el principal detalle en ella es la tela atada sobre sus ojos y que reza "bismillah", en árabe; lo cual se cree es una trampa para evitar que el djinn que habita su interior siga al dueño a su casa.
De acuerdo con el usuario de twitter que la encontró, la muñeca está poseída y se mueve cuando su dueño no está en casa, que puede ser escuchada hablando sola y que tiene la voz de una mujer adulta que habla en idioma malayo. Se le retiró la venda de los ojos, y su expresión parece enfurecida.
Peggy.
Jayne Harris, dueña de un negocio llamado "Haunted Dolls" en Inglaterra, recibió a Peggy como donación de una persona aterrorizada y convencida de que la muñeca era culpable de una serie de pesadillas espeluznantes; y que incluso los sacerdotes de la parroquia local fueron incapaces de ahuyentar a la presencia que habitaba la muñeca.
Tras que Jayne la expuso en su tienda, comenzó a recibir reportes de docenas de personas que habían tenido reacciones adversas a ver fotografías o videos de la muñeca. Cerca de 80 reportes que van desde errores en computadoras, jaquecas agudas, sensaciones de terror súbito hasta la aparición de presencias invisibles en las habitaciones de quienes ven a la muñeca.
Una mujer inclusive sufrió un paro cardiaco luego de ver un video donde Jayne aparece con Peggy en un automóvil; y un grupo de psíquicos que analizaron a la muñeca dicen que en ella hay un espíritu incapaz de descansar, frustrada y que fue perseguida en vida.
Nota: al escribir esta parte del artículo, ocurrieron ciertas cosas curiosas. Mi internet se desconectó varias veces al buscar imágenes de Peggy, y por alguna razón no pude subir una imagen acompañante en seis intentos diferentes.
La imagen de Peggy, así como su historia, pueden encontrarse en este enlace: http://www.inquisitr.com/2018481/peggy-the-haunted-doll-video-of-evil-spirit-possessed-doll-causes-viewers-to-have-chest-pains-nausea-and-headaches/
Películas como la trilogía de Chucky, la saga Puppet Master y ¿Dolly Dearest, han perpetuado el miedo del público hacia la idea de un muñeco poseído por el alma de un asesino o un demonio; mientras que filmes como Poltergeist o Annabelle han creado la idea popular de que muchas veces los encuentros con lo sobrenatural pueden corromper los inocuos juguetes de los niños que habitan un hogar.
La verdad es que, en la vida real ha habido incontables historias de muñecos que han sido poseídos o han causado desgracias a lo largo de décadas; y que hacen ver a los ya mencionados Chucky y Annabelle como figuritas inofensivas. Nombres como Robert o Annabelle ya son conocidos entre los amantes del miedo y el misterio, mientras que otros como Pupa o los muñecos de Pennsylvania resultan completamente desconocidos pero no menos aterradores que los dos mencionados previamente.
Los diablitos de Nueva Orleans.
Del Bebé Demonio de Nueva Orleans ya se ha hablado en este blog, pero en esta ocasión se contará la historia de las réplicas que pueden encontrarse en la ciudad. Tras el pánico en masa producido por los encuentros con el Bebé Demonio, los habitantes de Nueva Orleans comenzaron a tallar muñecos con la figura del infernal ser, con la idea de atemorizarlo.
Algunos de estos muñecos existen hasta la fecha, pero son extremadamente raros y muy caros. Aunque a comienzos del siglo XX, empezaron a aparecer muñecos como el mostrado arriba; réplicas supuestamente "idénticas" al Bebé Demonio, al grado de que se dice están poseídos por espíritus oscuros o el Bebé Demonio mismo.
Quienes han comprado estos muñecos, mencionan que son malévolos, que siguen a las personas con la vista y a veces se mueven por sí solos. Cabe mencionar que estos juguetes vienen con advertencias al comprador, mencionando los sucesos sobrenaturales que pueden ocurrir si se les adquiere.
Elmo.
En el año 2008, la familia Bowman compró un muñeco de la marca "Elmo Sabe tu nombre", el cual podía ser programado para recitar el nombre de su dueño junto con algunas otras frases personalizadas. De manera perturbadora, Elmo no solo empezó a repetir el nombre del pequeño de dos años a quien se le compró, James, si no que había comenzado a cantar "¡Matar a James!"al cabo de unos días.
Cabe mencionar que el muñeco comenzó a lanzar amenazas de muerte luego de que se le cambiaran las baterías por primera vez, y que la empresa Fisher-Price le ofreció a los Bowman un vale para cambiar el muñeco por uno nuevo.
Okiku.
La historia de Okiku se remonta a 1918, cuando un joven de 17 años llamado Ekichi Suzuki compró la muñeca al visitar una exhibición marítima en la ciudad de Sapporo, Japón. Obtuvo la muñeca en la calle de Tanuki-koji, una popular avenida turística y de negocios en la ciudad; y se la regaló a su pequeña hermana de dos años llamada... Okiku.
La niña amaba la muñeca y jugaba con ella todos los días, hasta que al año siguiente murió víctima de un fuerte resfriado. Tras la muerte de Okiku, la familia Suzuki colocó la muñeca en un altar doméstico y comenzaron a rezarle cada día para pedir por el descanso eterno de la niña. Luego de un tiempo, los Suzuki se dieron cuenta de que el cabello de la muñeca comenzaba a crecer; cosa que tomaron como un signo de que el espíritu de la pequeña Okiku había tomado posesión del objeto.
Letta.
En 1972, Kerry Walton encontró una vieja marioneta oculta bajo el porche de un edificio abandonado. De acuerdo con psíquicos que han analizado el juguete, fue hecho doscientos años atrás por un gitano romaní, a la memoria de su hijo que había fallecido ahogado.
La tradición gitana menciona la idea de la transferencia de espíritus, y que los juguetes por lo usual actúan como receptáculos para las almas de los muertos. Letta tiene cabello humano verdadero, y en el interior de su cabeza hay una réplica en madera de un cerebro humano
Letta es capaz de producir toda clase de fenómenos: llueve cuando el muñeco es sacado al aire libre, hace caer los cuadros en las habitaciones a donde es movido, los perros se tornan agresivos en su presencia y es capaz de producir un sentimiento de tristeza en quienes lo ven. Se dice que Letta puede moverse por sí mismo, cambiando de posición durante la noche y que incluso tiene un "pulso", como si un corazón latiera dentro de él.
Los muñecos de la cámara.
Propiedad de una familia en Pennsylvania, Estados Unidos; este grupo de ocho muñecos está habitado por espíritus o entidades y es monitoreado constantemente por una cámara de vigilancia que transmite señales a internet.
Ocasionalmente, la señal de la cámara falla o registra extraños sucesos. Por ejemplo, en el año 2009 captó lo que parece ser la imagen de un niño pequeño al fondo de la escalera que conduce al ático de los muñecos.
Pupa.
Esta muñeca, que data de la década de 1920, fue hecha en Italia como réplica de su dueña, una niña de cinco años que habitaba la localidad de Trieste. Pupa sobrevivió la Segunda Guerra Mundial sin daño, e inclusive acompañó a su dueña cuando ésta migró a lo largo de Europa y a Estados Unidos durante los años siguientes al conflicto.
La muñeca fue donada a un museo luego del fallecimiento de su dueña en el 2005, y desde entonces ha sido objeto de varios sucesos paranormales. Se dice que su expresión cambia, que puede mostrar un gran rango de emociones y que se puede mover sola. A veces empuja objetos a su alrededor, y al parecer odia estar encerrada; pues tiende a golpear el cristal del exhibidor donde se encuentra. En más de una ocasión, personal del museo ha visto a la muñeca presionando su mano contra el vidrio, o con las piernas cruzadas.
La muñeca de Singapur.
Esta muñeca fue encontrada en una vía popular de Singapur, y el principal detalle en ella es la tela atada sobre sus ojos y que reza "bismillah", en árabe; lo cual se cree es una trampa para evitar que el djinn que habita su interior siga al dueño a su casa.
De acuerdo con el usuario de twitter que la encontró, la muñeca está poseída y se mueve cuando su dueño no está en casa, que puede ser escuchada hablando sola y que tiene la voz de una mujer adulta que habla en idioma malayo. Se le retiró la venda de los ojos, y su expresión parece enfurecida.
Peggy.
Jayne Harris, dueña de un negocio llamado "Haunted Dolls" en Inglaterra, recibió a Peggy como donación de una persona aterrorizada y convencida de que la muñeca era culpable de una serie de pesadillas espeluznantes; y que incluso los sacerdotes de la parroquia local fueron incapaces de ahuyentar a la presencia que habitaba la muñeca.
Tras que Jayne la expuso en su tienda, comenzó a recibir reportes de docenas de personas que habían tenido reacciones adversas a ver fotografías o videos de la muñeca. Cerca de 80 reportes que van desde errores en computadoras, jaquecas agudas, sensaciones de terror súbito hasta la aparición de presencias invisibles en las habitaciones de quienes ven a la muñeca.
Una mujer inclusive sufrió un paro cardiaco luego de ver un video donde Jayne aparece con Peggy en un automóvil; y un grupo de psíquicos que analizaron a la muñeca dicen que en ella hay un espíritu incapaz de descansar, frustrada y que fue perseguida en vida.
Nota: al escribir esta parte del artículo, ocurrieron ciertas cosas curiosas. Mi internet se desconectó varias veces al buscar imágenes de Peggy, y por alguna razón no pude subir una imagen acompañante en seis intentos diferentes.
La imagen de Peggy, así como su historia, pueden encontrarse en este enlace: http://www.inquisitr.com/2018481/peggy-the-haunted-doll-video-of-evil-spirit-possessed-doll-causes-viewers-to-have-chest-pains-nausea-and-headaches/