miércoles, 10 de marzo de 2021

El autobús fantasma de Cambridge Garden.

 Los autobuses de dos pisos  son indudablemente una de las imágenes más reconocibles en la capital británica; y han sido popularizados en películas como "The Mummy Returns" y "Harry Potter and the Prisoner of Azkaban". Pero en torno a ellos hay una leyenda poco conocida que involucra la aparición de un ominoso vehículo con el número 7. 


En una madrugada de 1934, un conductor que transitaba el distrito londinense de Cambridge Gardens chocó estrepitosamente con una pared y falleció al explotar su vehículo. Cuando llegó la policía, varios testigos que salieron alarmados al escuchar el choque, empezaron a contar historias de un autobús fantasma que había sido visto durante varias ocasiones y que siempre aparecía a la 1:15 de la mañana... justo el mismo momento en que ocurrió el incidente.

A esto le siguieron relatos de como parecía que el autobús emergía de la nada, sin un conductor visible y con las luces apagadas; y perseguía a los peatones para arrollarlos o a veces obligaba a los conductores a dar el volantazo para evitar un choque. En ese momento, el autobús pasaba a toda velocidad junto a ellos, y se esfumaba sin dejar rastro.

Al continuar interrogaciones con más vecinos de Cambridge Gardens, se descubrió que además del detalle de las luces y el conductor inexistentes; la característica más específica del autobús era que contaba con un número 7 como identificación. Sin embargo, al investigar con las autoridades de transporte de la ciudad, la policía se encontró con que no existía un autobús 7; y tampoco había más autobuses que recorrieran Cambridge Gardens a esa hora de la noche. 


El misterio se intensificó, pues en el lapso que transcurrían las investigaciones, ocurrieron otros dos accidentes más. El 11 de junio ocurrió un incidente cuando un conductor murió en la curva de St. Mark's Road y un testigo declaró que había despertado al escuchar el sonido de un camión a toda velocidad. Al asomarse por la ventana, alcanzó a ver un enorme autobús rojo con las luces apagadas dirigiéndose contra un auto que circulaba en sentido contrario. 

El testigo procedió a contar que además del número 7, logró percibir la palabra GENERAL al costado del vehículo antes de que desapareciera al final de la calle. 

La intersección de Cambridge Garden y St. Mark's Road en la actualidad.

En los días siguientes, tanto la policía como la prensa fueron bombardeadas por cartas de vecinos de Cambridge Gardens y St. Mark's, todas detallando encuentros con el autobús fantasma y en especial, el reporte de un inspector de transportes quien aseguraba haber visto al vehículo entrando en el hangar de un estación de autobuses y desaparecer al cabo de unos segundos; e incluso el escuchar en ocasiones el inexplicable ruido de un motor cuando no había más autobuses en el lugar. 

Al verse imposibilitados de tomar acciones contra lo que a todas luces era un espectro, las autoridades londinenses optaron por mejorar la visibilidad y ensanchar el camino de la intersección entre St. mark's Road y Cambridge Garden. El autobús continuó siendo visto en varias ocasiones durante las décadas posteriores, pero ya sin ocasionar más siniestros. El último reporte del misterioso autobús 7 de Cambridge Garden ocurrió en 1990; cuando se optó por renovar la zona y eliminar la curva por completo, construyendo un camino en línea recta.

Se cree que la leyenda del autobús fantasma de Londres fue una inspiración directa para la creación del Autobús Noctámbulo de los libros de Harry Potter, escritos por J.K. Rowling. 


lunes, 8 de marzo de 2021

El Waitoreke - la nutria de Nueva Zelanda.

El waitoreke es una criatura de la mitología maorí de Nueva Zelanda cuya existencia siempre ha sido motivo de debate, pues entra el en reino de la criptozoología al ser visto en decenas de ocasiones por nativos maoríes, colonos europeos, exploradores, granjeros, turistas, cazadores y científicos desde siglos atrás. 

La teoría más aceptada es que podría tratarse de una foca, y los pobladores de origen europeo se refieren a él como nutria o castor de Nueva Zelanda, nutria maorí, ornitorrinco del sur y rata almizclera neozelandesa; debido a las características que presenta. 

Es usualmente descrito como un animal similar a una nutria dle tamaño de un gato, de pelaje corto de color marrón, y patas pequeñas y palmeadas. Se le ve cerca del agua en la isla sur de Nueva Zelanda, y no hay evidencia física de su existencia más allá de la obtenida por el científico Julius von Haast en 1868. 

En sus diarios, von Haast detalla que consiguió la piel de un waitoreke, y procede a describirla como suave, de color café claro, cubierta de puntos blancos y con los dedos similares a los de un roedor. Se cree que la piel podría pertenecer a un quoll (un marsupial carnívoro), pero esta teoría es descartada al saberse que el quoll nunca fue introducido a Nueva Zelanda, y que otros animales del mismo tamaño y características parecidas como la zarigüeya común  y la zarigüeya de cola anillada no presentan manchas. 

La mayoría de los avistamientos de este mítico animal ocurren en la isla sur de Nueva Zelanda, en específico cerca de la pequeña ciudad minera de Otautau; donde se han recopilado encuentros desde hace más de doscientos años y además de ello existen relatos entre los maoríes que hablan de una época en la cual sus ancestros habían domesticado al Waitoreke. 

El primer encuentro de un occidental con el Waitoreke fue por el legendario explorador James Cook, famoso por sus viajes alrededor del Pacífico. En su diario, Cook narra lo siguiente al cruzar el fiordo de Dusky Sound: 

"...Tres o cuatro días después arribamos a la bahía de Pickersgill, y a la vez que limpiábamos el bosque para colocar nuestras tiendas, un animal de cuatro patas fue visto por algunos de nuestros trabajadores; pero como ninguno pudo describirlo a la perfección, no sabría qué es. Lo que se acordó, es que era del tamaño de un gato, con piernas pequeñas y el color de un ratón. Uno de los marineros que pudo apreciarlo mejor, dijo que tenía una cola peluda y como la del chacal. La conjetura más probable es que se trata de una nueva especie. Y si así es, tal vez este país no está tan destituto de cuadrúpedos como pensábamos."

-James Cook, "Viaje a través del Polo Sur y alrededor del mundo", volumen 1.

En el siglo XIX, el naturalista, político y comisionado de Nueva Zelanda, Walter Mantell, propuso que el tamaño del animal debía ser de casi sesenta centímetros de la nariz a la base de la cola, con pelaje de un café sucio, patas cortas, una cola peluda y una cabeza con rasgos tanto de gato como de perro. Mantell continúa hablando de los hábitos del animal, diciendo que vive en madrigueras, su alimentación consiste de lagartos y peces, y no coloca huevos como los ornitorrincos. 

El pelaje del Waitoreke es descrito como algo parecido al del Quoll. 

En 1855, el reverendo Richard Taylor habla del Waitoreke como un carnívoro oportunista; y el libro 'Brehms Tierleben' de Alfred Brehm clasifica al animal como un mamífero muy primitivo, similar a una nutria y que ha sido visto tan cerca que incluso un granjero golpeó a uno con un látigo. 

En las exploraciones de Von Haast, el hombre dijo haber visto huellas de un animal desconocido en la nieve. Este caso fue reproducido en el libro de la Nueva Zelanda de Hochtetter, dando detalles de que Von Haast encontró al Waitoreke a casi 1000 metros sobre el nivel del mar; en el delta del río Ashburton; a su vez que también escribía que un grupo de granjeros lo vieron a una elevación de 640 metros, narrando que era de tamaño comparable al de una liebre.

En 1861, un diario de Christchurch publicó una nota sobre otro encuentro con el Waitoreke, esta vez siendo perseguido por un perro perteneciente a un tal capitán McMillan. El perro siguió al Waitoreke hasta la orilla de un río, donde desapareció.

Veinte años más tarde, un Waitoreke fue cazado en el distrito de Canterbury y comido por un grupo de pescadores Maoríes; y entre 1900 y 1940 llegaron decenas de reportes desde Milford Track sobre 'nutrias' que eran encontradas ahí y el lago Te Anau; incluído el de un equipo de naturalistas que encontraron a un animal en Waiau con el que no tenían familiaridad pese a conocer a casi todos los animales locales. 

Boceto del aspecto hipotético del Waitoreke.

Esta actividad disminuyó hasta 1968, cuando se vio a un Waitoreke cruzando la cañada de Stevenburn, cerca del río Whakea en Southland. El animal supuestamente dio vueltas en el área y después hizo señales a otros tres Waitorekes más pequeños que lo siguieron hasta la costa y desaparecieron en un área de pastizales. 

Dos años después, en 1971, un cazador en el río Hollyford se encontró cara a cara con un animal que describió como 'una nutria' jugando en el agua por espacio de quince minutos. 

En 1974, un ensayo científico sobre el Waitoreke fue escrito por G.A. Pollock, lo que condujo a una exhaustiva misión de rastreo en el área de los lagos Waihola y Waipori durante la década de los ochenta. 

Aún hoy, resulta posible ver esporádicamente al Waitoreke; y la ciencia no ha determinado qué clase de criatura podría ser. 


La identidad del Waitoreke.

Geológicamente hablando, Nueva Zelanda es una de las pocas másas de tierra que no cuentan con mamíferos de tierra nativos, aunque en la isla sur pueden encontrarse focas, leones marinos y murciélagos. Esto se debe a que Nueva Zelanda se separó del super continente de Gondwana hace ochenta millones de años; justo en pleno periodo cretácico.

Aunque recientes descubrimientos han traído a la luz la existencia de un fósil conocido como 'el mamífero de Saint Bathans', hallado en Nueva Zelanda y representando a un mamifero arcaico que data del periodo mioceno. El mamífero de Saint Bathans tiene rasgos que preceden a los placentarios y marsupiales, y se cree que podría haber mantenido una forma similar a la de aquellos mamíferos que habitaban en la época de los dinosaurios.

Hay partidarios de la criptozoología que sostienen que el Waitoreke no es más que una especie descendiente del mamífero de Saint Bathans, especializado para cazar reptiles y peces; pues la fauna de Nueva Zelanda consiste en su mayoría de aves que solo pueden desarrollarse en sitios donde no existen roedores, felinos o marsupiales que devoren sus huevos o los cacen.

La nutria indonesia o Simung. 

Existe también la posibilidad de que sea una especie desconocida de nutria mucho más pequeña que la europea, ya que hay testigos que aseguran que el Waitoreke es idéntico a la especie europea y un puñado más comparan al animal con el Simung o nutria de Indonesia. De estas, el Simung es probablemente el candidato más posible debido a que puede ser fácilmente domesticada y se utiliza como apoyo en la pesca de río. 

Probablemente, el Waitoreke sea una subespecie que pudo haber nadado desde los archipiélagos del sureste de Asia a Australia, y finalmente a Nueva Zelanda; y cuya población sobreviviente se concentra en Otago Occidental y Southland; en concreto las colinas de Canterbury y los ríos Waimakariri y Opuha. De cualquier manera, es posible que el desarrollo humano en los últimos siglos ha empujado a estos animales a sitios que hoy siguen estando sin explorar como Fiordland y Southland.

domingo, 7 de marzo de 2021

Espíritus del subterráneo - parte 2.

 Buenos Aires.

El Subterráneo o 'Subte' de la capital de Argentina posee el honor de ser uno de los sistema de transporte subterráneo más antiguos del mundo y el primero en su clase en Latinoamérica. Se inauguró en 1913 con la apertura de la Línea A entre Plaza de Mayo y Plaza de Miserere. 

Como ocurre con Glasgow, las primeras anécdotas de sucesos inexplicables inician con el proceso de construcción entre las estaciones previamente mencionadas; a raíz de que un muro colapsase sobre un par de trabajadores en el túnel. A raíz de ello, varios empleados a lo largo de las décadas han sido acosados por sonidos de pasos y la manifestación de rostros masculinos que se asoman al interior de los carros de tren cuando estos son limpiados en los túneles y desaparecen una vez que han sido vistos.

Durante el año inaugural del Subte, un empleado en la estación Sáenz Peña alertó a sus supervisores de que había encontrado un cadáver en el baño, pero este desapareció para cuando acudió personal a investigar al cabo de unos minutos. Al día siguiente, este suceso se repitió con otro trabajador, y desde entonces muchos bonaerenses insisten que en Sáenz Peña se puede percibir algo que provoca una incomodidad en quienes esperan su tren.

Continuando con la línea A, en el tramo entre Alberti y Pasco es posible ver las figuras de dos hombres sentados en un andén abandonado; además de 'algo' apaga las cámaras de vigilancia durante la noche. Sobre las cámaras, también cabe mencionar que supuestamente es común ver espíritus de aspecto aterrador en las mismas grabaciones. Finalmente, también en dichas estaciones se reportan constantes encuentros con espíritus que visten ropas de inicios del siglo XX. 

Otra leyenda popular entre los habitantes de Buenos Aires, es la de una novia fantasma cuyo origen cambia dependiendo de quién relate la historia; pues entre las distintas versiones se maneja que se suicidó arrojándose a las vías tras ser plantada en altar o tomó la decisión luego de verse obligada a casarse con un hombre al que no amaba. 

Quienes han tenido el infortunio de encontrarla, concuerdan en que el espíritu solo es visible por un momento y después se esfuma, además de que la creencia popular indica que el encontrarla representa un mal augurio para una pareja recién casada.


Moscú. 

El sistema de metro de Moscú ha sido inmortalizado no solo por la saga de libros y videojuegos de "Metro 2033", pues es también uno de los más misteriosos del mundo y se cree que inclusive por órdenes de Joseph Stalin se creó una red de transporte alterno y búnkeres conocida como Metro-2, para salvaguardar la existencia de Rusia en caso de que la guerra fría se tornara en un conflicto nuclear. 

En base a esto, es fácil saber porqué hay tantos relatos de aparecidos en el gran número de estaciones abandonadas desde la edad de la Unión Soviética, las cuales aparecen de forma fugaz al viajar en metro y han llevado a creer a muchos moscovitas que hay además de espíritus de los días de la cortina de hierro, toda infinidad de críptidos, monstruos y seres escapados de los proyectos más oscuros de la Unión Soviética. 

La primer leyenda nos lleva a las estaciones Krasnye Vorota y Pushkinskaya, tristemente populares para cometer suicidios. Y es que quienes por alguna razón evitan dar el salto hacia la muerte, dicen que al entrar a la estación se siente una extraña fuerza negativa que parece empujarlos a terminar con sus vidas; mismos que parecen desvanecerse una vez que se está lejos de estos sitios. 

Retomando el tema las estaciones fantasma, Volokolamskaya fue inaugurada en el 2009 pese a haber sido construida décadas antes; y tras una renovación total de sus instalaciones terminó resultando una decepción para las autoridades moscovitas, pues resulta ser una de las estaciones con menor afluencia en toda la red de transporte de la ciudad debido a el gran número de anécdotas sobre fantasmas que aterrorizan a los pasajeros y por ende, muchas personas prefieren evitarla. 

Continuando sobre la misma línea, se puede saber del mito apodado 'el conductor negro', la cual nace a raíz de un incidente en el que un tren se incendió por causa de un malfuncionamiento en la década de 1980. El conductor del tren era reconocido por ser de ascendencia africana, supuestamente etíope. Se dice que aunque hubo un gran número de víctimas, el conductor intentó rescatar a los más que se pudo; terminando gravemente herido de quemaduras y falleciendo horas dspués en el hospital. Se cree que por negligencia o simplemente racismo a la hora de tratar sus heridas, los médicos se rehusaron a atenderlo y por ende falleció. Hoy, hay quienes aseguran haberse encontrado con el espectro de un hombre de piel negra, gravemente quemado y que ronda las vías por las noches en busca de venganza. 

Similar a la anterior y derivada de otra tragedia, en diversas estaciones se habla de la aparición de una joven que desapareció misteriosamente en la boca de un túnel luego de ser acosada y perseguida por varios hombres mientras esperaba un tren durante la noche. Parece ser que su fantasma, que porta un vestido blanco, es visto constantemente de manera fugaz por los usuarios de los trenes. 

En la línea 5, existe la historia de un tren fantasma que aparece cada mes y recorre toda la línea con las luces apagadas y las puertas cerradas. Es descrito como un modelo antiguo que lleva décadas retirado de circulación, y que quienes suben en él por error jamás vuelven a ser vistos. En esa misma línea se habla del 'Lineman', un trabajador que falleció durante la construcción del metro y se aparece en las vías después de la noche, siendo visto por decenas de personas durante los últimos cuarenta años. 

Pero indudablemente, el fenómeno más infame es aquél que tiene que ver con un accidente en el año de 1982; cuando la escalera eléctrica de la estación de Aviamotormaya sufrió una avería al soltarse un escalón, el cual desató una reacción en cadena que aceleró la velocidad del mecanismo y concluyó con ocho personas aplastadas por una multitud que cayó encima de ellos luego de ser arrojados hacia el fondo de la escalera. 

Hay rumores de que, como ocurría usualmente bajo la férrea administración soviética, en realidad el accidente fue mucho más aparatoso y que incluyó a varias personas mutiladas por el mecanismo de la escalera; y aunque esto jamás fue confirmado, curiosamente quienes han visto aparecidos en Aviamotormaya sugieren que los fantasmas aparecen ensangrentados y grotescamente mutilados. 


Shanghai.

Caobao Road en el sistema de Shanghai tiene el ominoso apodo de 'la Estación Fantasma', debido a su cercanía con una famosa funeraria. Por eso mismo se tiene la creencia popular de que el lugar se encuentra bastante embrujado por espíritus que parecen haber escapado de la funeraria y encontrado un hogar en la estación. 

Las historias son muchas, pero las más notorias incluyen a un espíritu aterrador que tiende a jalar a los usuarios que se acercan al borde de la plataforma cuando se aproxima un tren, una niña con un vestido rojo que corre por las escaleras y pasillos, y la escalofriante risa de una mujer durante las noches y las horas con poco tránsito. 


Boston, Massachusetts.

En 1897, la estación de Boylston Street explotó debido a una fuga de gas que ocurrió poco tiempo antes de que se inaugurara Park Street. Se sabe que incluso un año atrás, los residentes y viajeros del subterráneo se habían quejado del olor a gas que permeaba la estación; pero nadie prestó atención hasta que una mañana de marzo en ese año, una chispa producida por el movimiento de un tren creó una conflagración al encender el gas. El resultado: seis personas muertas y más de sesenta heridas con quemaduras. 

Y aunque no existe una historia de fantasmas en sí sobre Boylston Street, parece ser que los muertos del incidente decidieron pasar a la estación siguiente, Park Street Station. De acuerdo con sitios que se dedican a vender tours de fantasmas en Boston, los registros de organizaciones paranormales cuentan con decenas de reportes sobre voces misteriosas, gemios y llantos; el avistamiento de personas vestidas con ropas anticuadas, presencias extrañas que acosan a los pasajeros y diversos puntos gélidos en la estación. 


Kolkata, India.

El Metro de Kolkata es el quinto más grande del país asiático después de los de Delhi, Hyderabad, Chennai y Namna; y es relativamente el más reciente, siendo inaugurado en 1984 luego de catorce años de construcción. La leyenda de la estación Rabindra Sarobar es trágica, pues la opinión popular sugiere que al final del andén y siempre al filo de las 10:30 de la noche, aparece una sombra que espera siempre al último tren que llega a la estación. 

Se dice que este fantasma es el espíritu de un hombre que se suicidó por una decepción amorosa luego de esperar a su pareja por horas en Rabindra Sarobar, y que está condenado a seguir con esa costumbre, en espera de alguien que jamás llegará. 


Dublín, Irlanda. 

En 2011, un guardia de seguridad en la estación Connolly se topó con lo que parecía ser un soldado de la segunda guerra mundial, que flotaba sobre la plataforma Número 6. El guardia, de manera sorprendente, procedió a gritarle y perseguirlo, pero la figura se esfumó ante la mirada atónita del hombre. 

Existe una leyenda urbana que dice que Connolly fue destruida durante un bombardeo en la segunda guerra mundial y que en ella fallecieron casi ochenta personas; y aunque esto fue desmentido por las autoridades de Dublín, varios investigadores paranormales que han visitado la estación coinciden en que efectivamente hay presencias dentro de ella. 


Bishan, Singapur.

La estación de Bishan MRT, obtiene su nombre del término cantonés para referirse a un gran cementerio, 'Peck San Theng', que a su vez se traduce en chino como 'Bishanting'. Esto debido a su cercanía con el cementerio Bi Shan Teng, por lo que se cree que varios espíritus del sitio fúnebre han pasado a ella. 

Desde su inauguración en 1987, no han faltado cuentos sobre actividad sobrenatural en su interior. Muchas mujeres dicen ser atacadas por manos invisibles, han aparecido fantasmas en las cámaras de vigilancia y es común escuchar a 'algo' que camina sobre los trenes en movimiento.