lunes, 2 de noviembre de 2015

El misterio de Reino Mágico.

La Blancanieves de Reino Mágico.
Ubicado en el puerto de Veracruz, el parque de diversiones conocido como Reino Mágico es quizás uno de los puntos más visitados de la ciudad; no solo por familias que buscan refrescarse del sofocante calor veraniego en sus albercas y toboganes, si no por los amantes de lo sobrenatural que buscan encontrarse con las presencias invisibles que supuestamente acechan en la oscuridad.
Quizás el misterio de la actividad paranormal en el terreno se debe a que el parque se construyó en lo que fue antiguamente el Panteón General de Veracruz.
Tras un largo proceso de aviso a las personas que tenían familiares enterrados en el camposanto, la remoción de miles de restos humanos y la tierra del cementerio; el parque fue inaugurado en noviembre de 1988 para alegría de los veracruzanos, que ahora contaban con un sitio de esparcimiento.
Hubo quien expresó su descontento por el "sacrilegio" de mover los restos humanos y tirarlos a fosas comunes, pero el gobierno de Veracruz explicó que muchos de los difuntos enterrados en el panteón no tenían familiares y no fueron reclamados durante el plazo dado por las autoridades. 

"Acudía gente al panteón porque se le avisó que iban a sacar al difunto y era gratuitamente, es cuando teníamos que sacar al difunto, llegábamos y era otro y otro, trabajábamos todo el día, nomás nos íbamos a comer y rápido a regresarnos a lo mismo y después contrataron más gente porque nosotros no nos dábamos abasto".
-Testimonio de un enterrador del Panteón.

Por las circunstancias inusuales de reciclar un cementerio para convertirlo en una zona de juegos para las familias del puerto, existe hasta hoy la creencia popular de que en Reino Mágico no solo hay almas en pena que siguen ancladas al sitio; si no restos humanos que no fueron removidos.
Testimonios de enterradores confirman que los restos más viejos en el panteón no fueron removidos debido a que resultaba bastante difícil sacarlos. 
Además de los supuestos cadáveres no exhumados, en la historia del parque hay historias de accidentes y muertes en las zonas del parque. El más famoso de estos tuvo lugar en la década de 1990, cuando una joven murió al fallar un juego mecánico instalado en el estacionamiento de Reino Mágico.
Recientemente, el 28 de junio de este mismo año, cuando un choque automovilístico cobró la vida de una mujer que transitaba frente al parque

Espíritus entre los juegos.
La historia más conocida de hechos sobrenaturales en el parque es tal vez la de las figuras que se mueven por las noches. El parque cuenta con varias esculturas de personajes de cuentos de hadas que, de acuerdo con la creencia popular, se mueven durante las noches.
Se habla de un caso en el cual un trabajador de limpieza de edad avanzada, escuchó ruidos por la noche y pensó que quizás alguien había traspasado al parque con el fin de hacer maldades. Al seguir el sonido, se aterrorizó y huyó despavorido al ver que las esculturas de los enanos de Blancanieves habían cobrado vida. El hombre murió una semana después por el susto de haber visto algo inexplicable.
En las albercas se dice que hay presencias fantasmales que jalan los pies o manos de los nadadores quizás con el fin de asustarlos o ahogarlos, niños fantasmas que corren entre los juegos y mueven los columpios, voces incorpóreas y apariciones de sombras... pero la historia más famosa (gracias a un programa televisivo y un video que hasta la fecha recorre las redes sociales y sitios como YouTube) es la de la Blancanieves viviente.

Entre las esculturas de polímero de vidrio que hay en el parque, es muy conocida la Blancanieves que según por las noches cobra vida y merodea por el lugar. En el video mencionado previamente, se puede ver a un grupo de jóvenes aventurándose al interior del parque durante la madrugada, y al grabar a la Blancanieves; se ve que ésta parpadea rápidamente.
Aunado a ello, algunos vecinos de la zona dicen que pueden tenerse sensaciones desagradables al transitar por ahí, escuchar lamentos y gritos; y que inclusive quienes intentan vandalizar las esculturas han sufrido cosas negativas.

Sarah Whitehead.

El Banco de Inglaterra, institución existente desde 1694 ha sido la fuerza principal de economía en las islas británicas por siglos. Ha visto pasar los días de grandeza del Imperio Británico, la extraña época victoriana, dos guerras mundiales y las revoluciones sociales del siglo XX... e inclusive fue sede de un descubrimiento arqueológico impresionante, una coincidencia en la cual se hallaron los restos de un templo romano dedicado al dios de la riqueza, Mithras.
Por lo cual, no es extraño que en sus arcas y salas exista más de un alma relacionada a esos siglos y los eventos que transcurrieron ahí. Una de ellas en particular es conocida como "La Monja Negra", y también por su nombre en vida: Sarah Whitehead.

La historia de Sarah comienza el 2 de noviembre de 1811, cuando Philip Whitehead, empleado del banco; fue arrestado y encontrado culpable de falsificación. Fue juzgado en el Old Bailey y sentenciado a la muerte; lo que ocurrió el año siguiente. Y si bien para el Banco de Inglaterra y los empleados la muerte de Philip concluyó todo el terrible asunto; pasa que nadie tuvo a bien informarle a Sarah lo ocurrido con su hermano.
Poco tiempo después, la joven entró al banco y pidió ver a su hermano. Los empleados, alarmados y preocupados porque al parece Sarah ignoraba lo del fallecimiento de Philip, le mintieron diciéndole que se encontraba lejos por motivos de negocios. Pero la cosa no quedó ahí. Sarah siguió yendo al banco todos los días hasta que finalmente, alguien se hartó y le gritó que Philip había sido ejecutado por falsificar dinero.
El shock súbito bastó para enloquecer a Sarah, y la joven continuó visitando el banco para preguntar por su hermano; haciendo caso omiso de las explicaciones que le daban los empleados. Para entonces, Sarah ya llevaba un vestido negro y un velo que perturbaban a los clientes y trabajadores. 
Cuando la noticia llegó a los dueños del Banco de Inglaterra, prometieron pagarle a Sarah todos los años acumulados de sueldo por su hermano si prometía no volver a poner un pie en el edificio mientras viviera.
Y Sarah cumplió su promesa hasta la muerte.
Fue enterrada muchos años después en un lote de tierra detrás del Banco de Inglaterra como un homenaje por parte de la administración. Lo que quizás fue un craso error, pues Sarah rompió su parte del trato al abandonar el mundo de los vivos... pues la ahora sí aterradora imagen de Sarah Whitehead comenzó a rondar Threadneedle Street y las inmediaciones del edificio.

Por casi doscientos años, la hermana ha sido vista incontables ocasiones llevando su vestido negro, preguntándole a los peatones de la calle si han visto a su hermano. Pero eso no la contenta del todo, pues también se manifiesta en los túneles subterráneos de la estación Bank. 
Esta estación del subterráneo londinense tiene una historia propia de terror. Fue construida sobre la ubicación de una fosa de plaga (donde los sobrevivientes de la Peste Negra echaron a muchos muertos por la enfermedad siglos atrás) y en 1941 fue bombardeada por la Luftwaffe, matando a diecinueve personas que tomaban refugio en su interior.
No es raro sentir aprehensión y tristeza al atravesar los túneles y pasillos de la estación, mientras que en los andenes pueden escucharse gemidos y llanto... ¿tal vez los de la propia Sarah?
Nadie lo sabe con certeza, pero un trabajador dijo haber sido perseguido por una espectral mujer idéntica a Sarah durante las altas horas de la noche; con el fantasma desapareciendo instantáneamente al llegar al nivel de la calle. 

El Chan.

En el pueblo de Apaseo el Alto, en el estado mexicano de Guanajuato, existe un gran número de manantiales en la zona conocida como la Cañada. De estos cuerpos de agua existe uno particularmente abundante, de aguas cristalinas y donde en la época prehispánica se realizaban ofrendas a los múltiples dioses de los pueblos nativos de México.
Con la conquista española y la subsecuente expansión de los colonos, se creó un canal conocido como "El Tajo" con el fin de explotar los manantiales, y ese en particular. La expansión y el crecimiento de la población trajo una mayor necesidad de agua; lo que llevó a la contaminación, el saqueo y la exploración de los innumerables lagos, manantiales y ríos de las montañas guanajuatenses.
Y fue ahí que empezó la leyenda del Chan.

A finales del siglo XIX, un grupo de aventureros que buscaba explorar la caverna desapareció sin dejar rastro alguno. Se decía que la cueva era infinita, que los ríos jalaban a aquel lo suficientemente tonto como para intentar nadar en ellos, y que las desapariciones se debían a un misterioso ser que devoraba a los humanos.
La identidad de la bestia, que fue conocida como "El Chan" varía dependiendo de quien la cuente. Un gigantesco pez, un demonio marino, un ser similar a un sátiro, un pez monstruoso con rasgos de puerco, una serpiente e incluso un aterrador hombre lagarto... todas esas suposiciones fueron dadas por quienes supuestamente habían visto al Chan. Pero la verdad era que nadie lo había visto de cerca.

Cuenta una historia que en una ocasión, un trío de amigos borrachos se decidieron a espiar a la bestia durante la noche. Envalentonados por el alcohol en sus venas, esperaron varias noches hasta que por fin lo vieron.
Pero lo más sorprendente era que cada uno decía que el Chan tenía una apariencia distinta: El primero decía que era un ser similar a un macho cabrío, otro que era un humano peludo y con tentáculos, mientras que el último mencionaba que era un demonio similar a un macho cabrío.

Con el tiempo, el problema de la escasez de agua y las desapariciones relacionadas con el Chan se intensificaron. Se decía que el Chan no devoraba a los hombres solo porque sí. Se creía que solo castigaba a quienes iban al manantial sagrado para obrar mal, a los que sacrificaban animales y a todos los que contaminaban el agua.
Al final, fue un sacerdote quien se decidió de una vez por todas a acabar con el monstruoso demonio del agua. Rezó el Ave María y la Magnificat, y arrojó agua bendita a la caverna para intentar romper el embrujo. Al hacerlo, explotó una tormenta eléctrica sobrenatural; como si la tierra misma se quejara del acto cometido.
Pero el sacerdote continuó, y los frutos de su labor se vieron con el tiempo. El agua de la caverna comenzó a secarse, hasta que un día, el Tajo y el manantial subterráneo se secaron. Aquí la leyenda se torna más misteriosa, pues se dice que un grupo de muchachos encontraron el cuerpo del Chan en medio del lodo y las plantas acuáticas en descomposición; y que el cadáver de la bestia fue comprada por un personaje apócrifo.

domingo, 1 de noviembre de 2015

El polvo en la alfombra.

Historia tomada de 4chan.

"Hace unos años compré un pequeño departamento para vivir con mi esposa. Estaba en nuestro rango de precio, sin problemas significantes y en general me parecía un lugar bien ubicado y seguro.
Lo único raro era que la alfombra estaba muy sucia.
Revisé el piso de madera bajo la alfombra y todo estaba bien. Así que lo más lógico era quitarla, tirarla y comprar una nueva. Sin problemas.
Pero la mujer a la que le compramos el departamento se enfureció una vez que le comenté por teléfono que cambiaría la alfombra. Comenzó muy pasiva, explicándome que era importante; y durante la discusión fue aumentando de tono ya hasta que al final le colgué cuando empezó a gritar y suplicar que no lo hiciera.
Raro, pensé.
Limpié todo antes de llevar nuestras cosas en la mudanza, y me di cuenta de que la aspiradora estaba jalando un ridículo montón de polvo gris de la alfombra. Soy asmático, y encontré muy curioso que todo ese polvo no me hubiese reducido a una masa jadeante y llorosa que no podía respirar.
Como dije. Raro, pero no me iba a quejar.
Unos días más tarde, arranqué la alfombra y la fui a quemar a casa de un amigo porque resultaba demasiado caro tirarla a la basura o pagarle a un camión de limpieza. Unos días más tarde, estaba limpiando el piso de madera cuando encontré una tabla suelta.
La quité con un martillo y encontré una caja de cartón con algo garabateado en ella. La abrí y encontré una bolsa de plástico llena de polvo o tierra gris. Esforcé la vista para descifrar los garabatos. 
Oh, joder.
Eran cenizas humanas. El garabato era el nombre del hijo muerto de la tipa que había vivido en la casa antes que nosotros. La llamé y le dije que viniera a recoger a su hijo (sí, sé que suena mal).
Vino rápido para recoger las cenizas, nos gritó por arrancar la alfombra y se fue hecha una furia. Qué mierda. Por eso estaba tan necia respecto a que dejáramos ahí la alfombra.
Por eso había tanto polvo en la alfombra.
Media bolsa llena de cenizas humanas.
La puta loca había esparcido a su hijo por toda la perra casa.

El fantasma del cine.

Historia tomada de 4chan.
"Fue durante mi tiempo en la preparatoria que entré a trabajar al cine.
Era uno de esos teatros que cobraban un dólar por función. El edificio tenía más de 30 años y hasta donde sé, había sido anteriormente la fábrica de una compañía manufacturera. 
Amaba ese lugar, y trabajaba casi 60 horas a la semana durante el verano. La paga era buena, pero a veces me tocaba permanecer hasta tarde haciendo reparaciones o limpiando. No me importaba, el lugar era como mi segundo hogar.
En una noche, me ofrecí a ayudar al gerente a cerrar, y estaba sentado en una sala vacía escuchando música (creo que era la sala 4, el cine tenía 7) y decidí volver hacia el lobby porque ya se acercaba la hora para salir. Me quité los audífonos de camino y al atravesar las puertas escuché un sonido raro. Un silbido.
Giré y vi una especie de nube o montón de humo flotando en la entrada. Era muy grueso y muy definido. La nube flotó por ahí durante un momento, después se elevó y desapareció. Me quedé sorprendido y decidí ir a ver de qué se trataba, saber si era una fuga de gas o algún ducto de ventilación en el piso. Pero no vi nada.
Estaba confundido, pero lo ignoré. Tenía trabajo qué hacer.
Durante el transcurso del año siguiente pasaron varias cosas raras, pero jamás pensé que se tratara de porquería paranormal. Todo mundo contaba historias de muertes en ese edificio, pero siempre era la clase de rumores que nadie podía confirmar.
Aunque en una ocasión, el gerente encontró a un tipo muerto al final de una película. Algo muy bizarro.

De todas las salas, creo que solo una me perturbaba.
La sala 1, donde jamás vi algo pero tenía esa atmósfera que no me dejaba estar tranquilo. ¿Sí saben como es esa sensación al entrar a un cuarto, y puedes saber que hay una televisión prendida aunque no la hayas visto o escuchada?
¿O esa sensación de que alguien más está ahí?
Bueno, cada que limpiaba esa sala, sentía como si el maldito lugar estuviese lleno de personas. Como si cada asiento estuviese ocupado y todos esos fulanos invisibles me miraran.
Llegó al punto en que tenía que entrar acompañado (aunque jamás expliqué porqué exactamente).
Cuando llevaba ya un año trabajando ahí, ocurrió que un familiar de un miembro del staff fue al cine y explicó que había trabajado ahí muchos años atrás. Nos contó toda clase de historias locas y eventualmente llegó al punto de mencionar que el cine estaba embrujado.
Y podría haberla ignorado como con las otras historias, pero dijo algo que me heló la sangre.
Dijo que la sala 1 y la 4 estaban llenas de malas vibras y pasaba toda clase de cosas extrañas en ellas. Sentí escalofríos pero guardé silencio mientras continuaba diciendo todo lo que había visto.
Al parecer, en la sala 4 había un niño fantasma que era asiduo a hacerle bromas al staff. Era amigable, según esta tipa. Pero en la sala 1 había algo más. Un demonio.
No dije nada, pero aún así... me dio mucho terror. 
Platicó que habían intentado hacer una sesión espiritista pero salió mal y todo mundo involucrado dejó de trabajar en el cine a raíz de lo ocurrido. Siempre he creído en fantasmas, he experimentado varios encuentros extraños y en cada casa que he vivido han tenido lugar eventos inexplicables.

Durante el verano siguiente, las historias se volvieron legendarias. El niño pequeño (al que llamamos BIlly) se volvió muy activo: tiraba cosas de los escritorios, hacía volar los vasos de los anaqueles, movía las cajas de combos que usábamos para los niños y en general movía todo lo que no estaba fijado al suelo.
El gerente instaló cámaras de seguridad pensando que eran bromas del equipo nocturno de limpieza, pero jamás se filmó nada relevante.
También escuchábamos que alguien corría en el cuarto de proyección durante las últimas funciones y a la hora del cierre. En una ocasión me tocó trabajar como supervisor, solo estábamos otros dos miembros del staff y yo; y cerca de quince clientes en el cine. Subi al baño del piso superior para hacer mis necesidades en paz: era un cubículo pequeño sin puerta, pero no se veía nada más que un pasillo que conectaba al cuarto de proyección.
Escuché pisadas provenientes de las escaleras, grité que estaba ocupado y no tuve respuesta. Las pisadas continuaron hacia el baño.

"Oye, pendejo, ¡estoy cagando! ¿Qué quieres?" Grité, pero no había ruido más que el de los proyectores trabajando.

Lo que fuese que estaba ahí, regresó por donde vino. Terminé de hacer, bajé y le pregunté al staff que qué rayos querían; pero ambos negaron haber subido y tampoco vieron que alguien subiera las escaleras. Joder, un fantasma me vio cagar.
Eso era todo. Decidí organizar una sesión espiritista para ver de qué demonios se trataba.
Empecé a investigar, compré las cosas que necesitaba e incluso reuní a un grupo de voluntarios con cámaras. Incluso estudié como ser un médium. 
Envié unos cuantos correos a algunos psíquicos y médiums pidiendo tips, pero casi todos me contestaron diciendo que era un estúpido y que no siguiera con mi plan. Me contaron veinte mil historias de horror sobre sesiones fallidas, pero no me importó. Como sea. 
Leí por ahí que una cámara en blanco y negro era buena para documentar fantasmas porque captaban mejor las fuentes de luz. Así que usé un filtro en mi teléfono y empecé a rondar por el cine en busca de lo sobrenatural. Tomé fotos en todos lados, con excepción de la sala 1 y uno de los baños. 
Al siguiente día estaba limpiando la sala 1 y hablando conmigo mismo. Eso es lo que hago cuando tengo que lidiar con lo espeluznante. Me hablo a mí mismo. Bromeo o cuento historias para no pensar que hay algo en las sombras.
Decidí hablar sobre la sesión y le dije a los fantasmas que estaban invitados a unírsenos. Al terminar y salir de la sala, me detuve y giré hacia los asientos.

"Oh, sí. Olvidé tomarte una foto." Dije, sacando mi teléfono.

En ese momento, el tejado crujió horriblemente. Salí corriendo y me di cuenta de que lo que vivía en la sala 1 no quería que le tomaran fotos. Ese día más tarde obligué a alguien a que me acompañara para tomar una foto, pero no pasó nada raro.
Aunque creo que me siguió, porque en mi casa comenzaron a suceder cosas extrañas.
Nunca tuvimos problemas con el lugar, por cierto. En una ocasión, salí de mi habitación durante la madrugada y al atravesar el arco de la puerta, sentí un dolor en la espalda. La luz parpadeó y escuché a una mujer gritando junto a mi oído.
Al día siguiente de eso, fui a la habitación de mi hermana para platicarle. Estaba sentada en su cama, y mientras hablaba con ella vi que abrió los ojos como platos. Apuntó hacia algo atrás de mí.
Aparentemente, uno de sus cajones se abrió por sí solo. Giré y lo vi moverse, justo a tiempo para que me cayera encima.
Lo alcancé a agarrar, pero una lámpara salió volando a través del cuarto; y otro cajón se abrió y me golpeó en la rodilla. Caí, con el cajón encima de mí. Mi hermana se partía de la risa, lo que hizo que papá fuera a vernos y dijera "ponte quieto".
Empecé a pensar que la sesión no era la mejor idea, y que todo esto era una amenaza. Pero aún así, tenía que hacerla para descubrir qué carajo estaba en el teatro. 
Más tarde esa semana, papá me hizo ir y hablar con nuestro pastor. Estaba preocupado sobre las cosas espiritistas en las que me estaba metiendo, y el pastor sabía que sí, algo raro pasaba en mi casa. Me explicó que sí existen los espíritus, pero que no siempre son personas muertas, y que lo único que ronda la tierra son ángeles o demonios.
Tenía un punto válido. Y esta mierda definitivamente no era un ángel.
Eventualmente decidí que la sesión no era buena idea, así que la abandoné y continué con mi vida. Siguen pasando cosas raras, pero ya no tanto como antes.
Y todavía no sé qué hay en ese cine."

lunes, 19 de octubre de 2015

Las ánimas del castillo Leap.

Acceso al Castillo Leap.
En el condado irlandés de Offaly, cerca a la ciudad de Birr; se encuentra un paso estratégico que atraviesa el rango montañoso de Slieve Bloom y permite el paso a la provincia de Munster. Desde épocas inmemoriales, ha sido un sitio disputado constantemente, siendo controlado en los 1200s por el clan O'Carroll y en el siglo XV pasó a ser propiedad del clan O'Bannon, quien construyó una fortaleza para proteger el sitio a finales del siglo.
El nombre del castillo es "Lein Ui Bhanain", que se traduce como "Salto de los O'Bannons". El clan O'Carroll, que recuperó la posesión del castillo en los 1600s, era una familia de pendencieros que solían realizar banquetes para sus enemigos bajo la promesa de una reconciliación; para luego masacrarlos sanguinariamente o envenenarlos mientras comían.
En la actualidad, a la fortaleza se le conoce como el castillo Leap, y puede ser visitado libremente desde la autopista R421, a unas millas al norte de la aldea de Roscrea. Por su rica historia de asesinatos, caos y traición; no es de extrañarse que el castillo sea considerado el sitio más embrujado del mundo. En sus corredores, torres y salas hay muchos espectros; entre los cuales se encuentran una vengativa mujer vestida de rojo, esqueletos vivientes, monjes espectrales, poltergeists, niños fantasma y una aterradora criatura conocida como "El Elemental".

La Capilla Sangrienta.
El primer espíritu del que hablaremos en esta ocasión es aquel del sacerdote de la Capilla Sangrienta. En 1532, el jefe del clan, Mulrooney O'Carroll; murió sin dejar un sucesor designado. Sus hijos lucharon entre sí por el honor, lo que llevó al asesinato de uno de ellos; un sacerdote.
En un día fatídico, se encontraba dando misa en la planta alta de la torre cuando su hermano, conocido como Teige O'Carroll "El Tuerto"; entró corriendo y lo apuñaló en el pecho. Mortalmente, herido, el sacerdote colapsó sin vida sobre el altar. Desde entonces, el sitio ha sido conocido como "La Capilla Sangrienta".
Los visitantes al castillo dicen haber visto al sacerdote en un pequeño túnel a la izquierda de donde estuvo el altar en alguna ocasión; y en el área pueden escucharse ruidos extraños y sonidos.

Emily y Charlotte.
Dos de los espíritus más activos (de acuerdo con el dueño de la propiedad, el músico Sean Ryan) de la propiedad, son dos niñas llamadas Charlotte y Emily. Se cree que vivieron en el castillo en los 1600s, y que sus muertes fueron igual de trágicas.
Las circunstancias exactas del fallecimiento de Charlotte son inciertas, pero se especula que puede haber contraído una enfermedad fatal. Emily, por otro lado, cayó desde el muro sureste de la torre. Aparecen por las noches, soltando gritos que hielan la sangre; y en ocasiones son acompañadas por otra mujer fantasma a la que se le conoce como "La Gobernadora", y que ha sido vista cocinando en una olla en el primer piso.

La Dama de Rojo.
Subiendo la intensidad de las apariciones, es hora de hablar de la Dama de Rojo que aparece en la galería principal del castillo. La leyenda reza que fue asesinada al ser empujada de un balcón que da hacia la galería, cayendo varios metros y rompiéndose el cuello. Se manifiesta como un espectro esquelético que empuña una daga y avanza flotando ominosamente por la galería.

El Oubliette.
El Oubliette.
En 1922, durante la guerra civil irlandesa, gran parte del castillo fue quemado por el IRA. Durante la limpieza posterior y remodelación, se encontró un área conocida como el "Oubliette". La palabra, de origen francés, significa "olvidar".
El Oubliette se encuentra al fondo de un foso, en el cual hay una gran púa de metal que apunta hacia arriba. Aquellos desafortunados que fueron ejecutados por los sanguinarios clanes del castillo, caían en la pila hasta morir desangrados luego de varias horas. Se dice que para sacar todos los cuerpos del Oubliette, se necesitaron tres camiones.

El Elemental.
Reconstrucción del "Elemental".
Pero de todos los espíritus que pueblan este lugar, quizás el más horrible de todos es aquél al que se le conoce como "El Elemental". Es una entidad misteriosa que ha sido avistada por decenas de personas a lo largo de muchos años.
Se dice que el castillo siempre estuvo habitado por un espíritu peligroso, que posiblemente fue invocado por los druidas que habitaban el paso de las montañas siglos antes de la construcción del castillo, con el fin de proteger su sitio sagrado. Otra teoría apunta a que fue puesto ahí por una fuerza invasora que buscaba destruir el castillo desde adentro, y se menciona que el culpable fue el conde de Kildare; un conocido practicante de magia negra que intentó capturar Leap en varias ocasiones.
Las leyendas locales dicen que el Elemental es el espíritu corrupto de un ancestro del clan O'Carroll; el cual falleció en el castillo luego de una larga agonía por la lepra; lo que le da esas características de descomposición facial y la peste que rodea al espíritu.
Pero la historia más aceptada es la de Mildred Darby.
Mildred era esposa de un propietario del castillo a comienzos del siglo XX que tenía un gran interés en lo oculto y la magia negra. Se cree que una combinación de sus sesiones espiritistas y el descubrimiento del Oubliette fue la culpable de que el espectro del Elemental apareciera, porque poco después de la limpieza fue que Mildred tuvo un encuentro terrorífico con este ser.
No se sabe qué pueda ser, pero sí se tiene una idea de que solo se manifiesta cuando la gente lo provoca. Mildred Darby y varios aventureros y amantes de lo sobrenatural han sido no solo testigos de su aparición; si no que han recibido ataques del Elemental.

El relato de Mildred Darby:
"Dos manos me tomaron de los hombros. Giré abruptamente y vi, tan nítido como una persona real, a una 'Cosa' gris a unos cuantos pies de mí. Tenía los brazos alzados, como si quisiera maldecirme. Y no podría usar palabras para describir qué terrible era esta Cosa, su incongruencia física era enorme. Tenía la figura de un hombre pequeño, con dos grandes agujeros negros en lugar de ojos y rasgos como los de un muerto... Y toda esta cosa estaba sucia y cubierta de pelo similar al algodón. ¡Pero Oh, siniestro, repulsivo y demoniaco! Mis amigos que son diestros en lo oculto dicen que es lo que se conoce como un 'Elemental'.
La cosa era del tamaño de una oveja, delgada, demacrada y oscura. Su rostro era inhumano, lleno de vileza y grandes fosos negros en lugar de ojos; con labios abiertos y babosos, y saliva escurriéndole por la quijada. No tenía nariz, solo cavidades cavernosas en medio de ese rostro uniformemente gris. Sus manos terminaban en zarpas y lo rodeaba una peste que ofendía la nariz. El olor de la muerte, llenándome de náusea.
Me di cuenta de que el cuerpo de la criatura era vaporoso, indefinido y semitransparente. Podía ver el marco de la galería y la pared a través de él."

domingo, 18 de octubre de 2015

Slag - El demonio del Horno Sloss.

Uno de los túneles del horno Sloss.
El Horno Sloss es una planta industrial ubicada en la ciudad de Birmingham, Alabama; y en sus casi 90 años de operación, su producción de acero aportó la mayoría del metal usado para la construcción de los rascacielos neoyorquinos. En la actualidad, se encuentra clausurada y es considerada un patrimonio histórico.
Durante su periodo activo, de 1880 a 1872, El Horno Sloss fue sede de cientos de accidentes industriales con un alto índice de mortandad. La mayoría de los reportes son vagos y no se pueden verificar al cien por ciento, pero sí hay una lista de trabajadores que perdieron la vida en el interior del complejo industrial. 
En el libro "Sloss Furnaces and the Rise of Birmingham District" de W. David Lewis, se narran decenas de estos, entre los que se incluyen:
-Un trabajador que fue prensado por una rueda mecánica al engancharse la manga de su camisa con esta.
-Un hombre que resbaló de un andamio y cayó a un contenedor de acero fundido, siendo desintegrado en segundos.
-Varios trabajadores que cayeron de las pasarelas superiores y se estrellaron en el piso.
-Víctimas achicharradas por ráfagas de vapor súper caliente.
-Dos hombres que limpiaban las paredes de un horno y que perdieron la consciencia al inhalar vapor tóxico; cayendo al metal fundido del fondo.
-Una explosión en 1888 que quemó los ojos de seis hombres.
-El colapso de un andamio que lisió a dos y mató a otros seis.

Dada la historia trágica de la fábrica, no es de sorprenderse que tenga una reputación de estar embrujada. Entre los reportes se habla no solo de apariciones espectrales, si no silbatos que soplan por sí solos, pisadas misteriosas, golpes, gritos, sombras, orbes y nieblas entre los hornos. 
En el año 2003, un trabajador del sitio histórico fue enviado al hospital tras incendiarse espontáneamente y sufrir fuertes quemaduras. La víctima fue interrogada y dijo que comenzó a quemarse tras encontrarse cara a cara con una misteriosa figura en las sombras.
De estos espíritus, quizás el más aterrador es el de James Robert Wormwood, también conocido como "Slag"; un cruel capataz que hasta el día de hoy continúa rondando el sitio de su muerte.

Slag.
"Slag" era el capataz encargado del turno de la noche. Durante el verano cálido de Alabama, las temperaturas de la fundición alcanzaban más de 50 grados centígrados, por lo que la falta de sueño, el calor y la poca visibilidad producida por el vapor y el humo convertían el horno durante las noches en un infierno en la tierra donde solo los más desesperados se aventuraban a laborar.
Wormwood, un tirano enfocado en quedar bien con sus jefes; obligaba a sus empleados a acelerar la producción sin importar lo que les ocurriese. Durante su cargo, 47 hombres perdieron su vida (diez veces más que en cualquier periodo en la historia del Horno); y cientos más fueron mutilados e incapacitados por accidentes y una explosión en 1888..
Para Slag no había vacaciones o días feriados. Para él solo existía el Horno Sloss.
Pero naturalmente, todo debe llegar a un final. Y el de Slag llegó en octubre de 1906, cuando cayó al horno más grande (conocido como "La Gran Alice") y fue desintegrado en un segundo. Oficialmente fue  un accidente, pero hay quien menciona que los trabajadores de la fundición finalmente se habían cansado de él...
De todos modos, ni siquiera la muerte pareció detener al capataz. Desde su muerte, muchos empleados de la fábrica dijeron haber sido "empujados" por manos invisibles y haber escuchado a un hombre invisible gritando "¡Vuelvan al trabajo!".
La historia más aterradora relacionada con Slag tuvo lugar en 1971, justo la noche anterior a que Sloss cerrara sus puertas para siempre. Esa noche, el vigilante Samuel Blumenthal estaba dándole un último vistazo a la fábrica cuando se encontró cara a cara con lo que describió como un demonio que intentó hacerlo caer de las escaleras.
Blumenthal, que fue hallado al día siguiente cubierto con graves quemaduras, dijo que el demonio lo atacó a puñetazos por espacio de unos segundos; para después desaparecer en el aire. Esa noche, Blumenthal falleció en el hospital por lo terrible de sus heridas.

miércoles, 14 de octubre de 2015

Mythos de Cthulhu no.9 - Hastur

"Me encontré rodeado por nombres y términos que había escuchado anteriormente en las más horribles de las conexiones... Yuggoth... el Gran Cthulhu... Tsathoggua... Yog-Sothoth... R'lyeh... Nyarlathotep... Azathoth... Hastur... Yian... Leng... el lago de Hali... Bethmoora... el Signo Amarillo... L'mur-Kathulos... Bran y el Magnum Innominandum...
Y me sentí movido a través de innombrables eones y dimensiones inconcebibles a los mundos de una entidad antigua y exterior la cual el autor del Necronomicon solo había adivinado de forma vaga... Hay todo un culto de hombres malvados (Un hombre de vuestra erudición mística sabrá a qué me refiero cuando los enlace con Hastur y el Signo Amarillo) devotos al propósito de rastrear y herir a otros en nombre de los monstruosos poderes de otras dimensiones..."
-H.P. Lovecraft, "El Susurrador en la Oscuridad".

También conocido como el Innombrable, Aquél que No Debe Ser Nombrado, Assatur, Xastur, Haaztre o Kaiwan; es quizás uno de los enigmas más grandes de los Mythos de Cthulhu. Su origen tuvo lugar no en la mitología de Lovecraft, si no en el relato "Haita el Pastor", escrito por Ambrose Bierce cuando H.P. Lovecraft solo tenía tres años de edad.
Originalmente descrito como una deidad benévola de los pastores, con el tiempo fue alterado por diversos autores hasta que llegó a manos de Lovecraft; quien convirtió al otrora dios benigno en una monstruosidad ignota e inclusive más perversa que el mismo Nyarlathotep o Cthulhu. August Derleth, parte del círculo de escritores que trabajaron en los Mythos de Cthulhu; escribió que Hastur era parte de la progenie de Yog-Sothoth y medio hermano del Gran Cthulhu.

El Rey Amarillo.
"La ambición de César y Napoleón palidece ante lo que no puede descansar hasta que se ha apoderado de las mentes de los hombres y controlado incluso los pensamientos que aún no han nacido... Es el Rey al que los emperadores sirven."
-Robert W. Chambers, "El Rey Amarillo".
Robert W. Chambers usó a Hastur desde 1895, en la serie de historias conocidas como "El Rey Amarillo", donde a la deidad se le menciona como un ser potencialmente sobrenatural en "El Signo Amarillo".
Aquí también se menciona a la ciudad de Carcosa, el lago Hali, y las estrellas de Aldebarán y las Hiades con relación a Hastur. Lovecraft leyó el libro de Chambers en 1927 y quedó tan admirado que añadió los elementos de éste a sus propias creaciones. 
Chambers presenta a Hastur como una entidad poderosa, insidiosa y con un deseo de dominación; al grado que busca lograr sus objetivos sembrando ese mismo deseo en las mentes de reyes, emperadores y conquistadores. El Rey Amarillo, avatar de Hastur, mora en la oscuridad de la ciudad de Carcosa; a orillas del Lago Hali en las Hiades. Sus descripciones parecen implicar que este lugar se encuentra en otra dimensión:
"A lo largo de la costa rompen las olas. Los soles gemelos se hunden bajo el lago. Las sombras crecen.
En Carcosa extraña es la noche en donde nacen las estrellas negras, y las extrañas lunas surcan los cielos. Pero más extraña es la Perdida Carcosa.
Canciones que las Híades entonarán. Donde ondean los harapos del Rey. El sonido debe permanecer sin escuchar en la Sombría Carcosa. Canción de mi alma, mi voz está muerta. Permanece sin ser pronunciada, que las lágrimas sin derramar se marchiten y mueran en la Perdida Carcosa.
-La Canción de Cassilda, en la segunda escena del primer acto del "Rey Amarillo".

El Rey Amarillo es un ser harapiento, vinculado a la misma Carcosa y con una motivación imposible de entender para las mentes humanas. No se sabe qué lo motiva, qué busca o cual es su deseo... pero aparece en la Tierra de vez en cuando. Puede despertar y reanimar a los muertos, poseer a los hombres y reclamar a aquellos que hacen tratos con él.
Se dice que el solo leer la obra del "Rey Amarillo" expone al lector a la influencia de este ser que si bien no aparece en las historias, está siempre presente con el Signo Amarillo.

Lovecraft, al igual que Chambers y Bierce; dotó a Hastur de una naturaleza ambigua y mística, pero le añadió la fatalidad y horror cósmico inherente del setting de los Mythos de Cthulhu. En "Horror Sobrenatural de la Literatura", Lovecraft escribe lo siguiente sobre el Signo Amarillo:
"...Tras tropezarme estúpidamente con el infernal y prohibido libro de horrores, los dos aprenden que entre otras cosas que ningún mortal sano debería saber; este talismán no es otro más que el Signo Amarillo, pasado de mano en mano por el culto maldito de Hastur desde la primigenia Carcosa..."

Así, Lovecraft se dedicó a convertir a Hastur en parte del panteón de los Primigenios y los Dioses Exteriores; trabajo que fue expandido por August Derleth, quien convirtió a Hastur en el engendro de Yog-Sothoth, Hermano de Cthulhu y posiblemente el Magnum Innominandum.
En los Mythos, Hastur cuenta con varios avatares:
El Devorador del Más Allá: Una monstruosidad negra y marchita, con tentáculos llenos de púas afiladas que pueden perforar cráneos y extraer el cerebro de sus víctimas.
El Rey Amarillo.
El Morador de las Profundidades.
Engendro de Azathoth.
Pareja de Shub-Niggurath y padre de Nug y Yeb.
Príncipe de los Primigenios.
El Sacerdote que no debe ser Mencionado.

Penanggalan.

De la infinidad de vampiros que pueblan el folklore del sureste de Asia, pocos son tan desconcertantes como el Penanggalan o "Hantu Penanggalan". Es similar al Manananggal de las Filipinas, y su nombre significa "remover" o "soltar".
Esta criatura aparece con muchos nombres entre los diversos grupos étnicos de Indonesia. Los balineses le llaman Leyak, los Dayak le dicen Kuyang, los Minangkabau le dicen Pelesit; en Tailandia se le conoce como Kasu o Phi-Kasu, y en Camboya es el Ap.

Descripción.
El Penanggalan es, para todos propósitos, una cabeza de mujer que vuela por los aires y es seguida por sus intestinos y entrañas, los cuales cuelgan tras ella como la cola de una cometa. Todos estos órganos tienen la extraña propiedad de brillar como luciérnagas cuando el Penanggalan se mueve entre la noche.
Se cree que es el resultado de magia negra, y por lo tanto no puede ser clasificado como un fantasma o un no-muerto; pues durante el día es una mujer común y corriente.
Este monstruo se crea cuando una mujer hace un pacto para ganar poderes sobrenaturales. Para cumplir ese pacto, debe evitar probar carne durante cuarenta días; de lo contrario se transformará en un vampiro demoníaco. 
Otra variación de la historia reza que el Penanggalan fue en alguna ocasión una sacerdotisa que tomó un baño ritual en una bañera llena de vinagre. Al meditar, un hombre entró sin advertencia y la asustó tanto que la mujer se sacudió con la fuerza suficiente para decapitarse a sí misma.
Furiosa por lo ocurrido, la cabeza salió volando tras el hombre; con las entrañas arrastrando tras de sí y chorreando veneno. Su cuerpo vacío fue dejado en la bañera, y se dice que por ello el Penanggalan deja un fuerte olor a vinagre por donde pasa; y que si bien vuelve a ser una mujer al amanecer, puede ser reconocida fácilmente por el aroma que desprende.
Finalmente, se cree que también es el alma de una mujer que murió al dar a luz.

Modo de ataque.
El Penanggalan usualmente ataca a mujeres embarazadas y niños pequeños. Siempre que una mujer va a dar a luz, aparece y se posa sobre el tejado de la casa donde está naciendo el niño. Al nacer el pequeño, lanza un grito similar al de la Banshee y entonces vuela al interior de la casa y usa su lengua para succionar la sangre de la madre.
Aquellos cuya sangre es chupada por el Penanggalan contraen una enfermedad que es siempre fatal, mientras que ser tocado por sus entrañas chorreantes produce dolorosas pústulas que solo pueden ser sanadas por un sacerdote o un médico brujo.
Aunque puede consumir carne y sangre de cualquier persona, el Penanggalan prefiere el líquido vital de los bebés y la placenta. Se dice que el este monstruo puede "escurrirse" entre las grietas de las paredes y las tablas del piso de una casa a la hora de buscar a sus víctimas. También pueden usar sus intestinos como tentáculos y látigos.

Protección contra el Penanggalan.
De acuerdo con la tradición de Malasia, la forma más popular de detener el ataque de un Penanggalan es el dejar las hojas espinosas de una planta llamada Mengkuang. Se dice que las espinas de esta planta pueden perforar y atravesar los órganos del monstruo a la hora de que este vuela por los aires.
También se puede dejar piñas en la casa, las cuales evitan que el Penanggalan entre por las paredes o el piso. Una vez atrapado, el monstruo es incapaz de volar y puede ser matado con machetes. Como precaución extra, se deben dejar tijeras o pinzas de acero bajo la almohada de una mujer embarazada, pues el Penanggalan les teme.
Para detectar a uno de estos seres, se debe prestar atención al comportamiento de mujeres sospechosas. Un Penanggalan en forma humana evitará el contacto visual a la hora de hablar con una persona, se lame los labios al escuchar mencionar a mujeres embarazadas o bebés; o sencillamente apestará a vinagre.
Al descubrirse donde vive, se debe esperar a que salga de su cuerpo por la noche y entrar a la casa; con el fin de rellenar el cuerpo vacío con fragmentos de vidrio que se introducen por la cavidad del cuello. Una vez que el vampiro regrese y se inserte en su cuerpo, el vidrio lo destrozará y lo matará. Otra forma de acabar con ellos es cremándolo o santificando el cuerpo, aunque también funciona el prevenir que pueda volver a casa al amanecer.

El Manananggal y el Penanggalan.
Si bien son parecidos y comparten rasgos similares, el Penanggalan difiere de su primo por el hecho de que a diferencia de este, todos los Penanggalan son femeninos. Otra diferencia es que el Penanggalan tiene un ritual específico para volver a su cuerpo, el cual consiste en sumergir sus órganos en vinagre y encogerlos para permitirles caber en el cuerpo hueco.
Tampoco tiene la lengua probóscide del Manananggal, pero a cambio de ello posee colmillos afilados en toda la boca.

lunes, 12 de octubre de 2015

La dama enlutada.

La siguiente historia tuvo lugar hace años en San Luis Potosí, durante una fría noche de noviembre. En ella, se relata el escalofriante encuentro de un taxista con una misteriosa pasajera que lo lleva a visitar varias iglesias de la localidad y que lo deja con una sorpresa poco menos que agradable...

"Era el mes de noviembre.
Abel, un taxista, se encontraba conduciendo su vehículo a las dos de la mañana luego de una jornada particularmente pesada. Su último cliente se bajó en las orillas de la ciudad, cerca de una iglesia conocida como el Templo del Señor del Saucito; que se se encuentra cerca de un panteón con el mismo nombre.
Cansado, Abel decidió conducir de vuelta a su hogar y terminar la jornada laboral; pero tuvo a mal encontrarse con una mujer vestida de negro que le hizo la parada. El taxista decidió llevarla, mitad preocupado por el bienestar de la dama a esas altas horas de la madugada, y mitad decidido a ganar unos centavos más.
Al abordar, la misteriosa mujer le pidió que la llevara a varios templos, a lo que Abel repuso que a esa hora no había ninguno abierto; pero la mujer fue insistente y le dijo que no buscaba entrar en ellos, si no rezar frente a las puertas. Resignado, el hombre la llevó a cada uno de sus destinos; y al acercarse a la séptima iglesia, la mujer con el rostro cubierto por un velo, le pidió que por favor la dejara donde había hecho la parada.
Para desconcierto de Abel, la dama le dijo que no contaba con dinero, pero explicó que su hermano pagaría todo al día siguiente si el taxista lo visitaba y le contaba lo ocurrido. Como prenda, le entregó una medalla con su nombre: "Socorro", así como una carta para su hermano.
Al taxista no le quedó otra más que aceptar y guardar ambos objetos en su pantalón. Se dirigió al lugar donde la mujer había subido a su vehículo, y al orillarse y detenerse para permitirle el descenso; se sorprendió de que no se escuchó el sonido de la puerta del taxi abriéndose y cerrando. Al mirar por el retrovisor, se encontró con que la dama misteriosa ya había desaparecido.
Escéptico, Abel pensó que estaba tan cansado (y enojado) que no escuchó cuando la mujer bajó del taxi, pero tampoco había rastro alguno de ella en las inmediaciones; y por más rápido que pudiera correr, no había forma de que desapareciera así como si nada durante la noche.
Abel volvió a casa, pero fue incapaz de dormir... en su mente solo se encontraba la imagen de la dama. Algo en ella le parecía muy misterioso, por lo que al día siguiente se dirigió a la dirección dada por la mujer.
El hombre, hermano de la susodicha en cuestión, era un licenciado de nombre Mario Palomares. Al hablar con él, Mario palideció y luego de pagarle, le dijo que se sentía obligado a decirle que Socorro había muerto dos meses atrás.
Cabe mencionar que Abel, aterrado, rechazó el pago y volvió a casa; atormentado por la idea hasta que unos meses después falleció por la impresión."

domingo, 11 de octubre de 2015

La bruja de Monterrey.

A las 3:15 de la mañana del viernes 16 de enero del 2004, el oficial de policía Leonardo Samaniego tuvo un encuentro con lo sobrenatural en el municipio de Guadalupe, parte de la zona metropolitana de Monterrey, México.
Samaniego se encontraba patrullando en la colonia Valles de la Silla cuando al girar en la calle Aldama, notó que algo grande y negro había caído de un árbol.El objeto no tocó el suelo, si no que levitó lentamente y giró hacia el vehículo conducido por el policía.
Éste lo iluminó con las luces altas y se dio cuenta de que era una especie de humanoide con grandes ojos negros, piel café y que vestía como una bruja estereotípica. La criatura se cubrió los ojos al ser deslumbrado, pero luego de eso se abalanzó sobre la patrulla y sacudió el vehículo con violencia. Samaniego luchaba por pedir ayuda a través del radio del vehículo, mientras aceleraba hacia atrás y veía con horror como la "bruja" intentaba destrozar el parabrisas para agarrarlo. Al no ver a donde conducía, Samaniego chocó el vehículo y perdió la consciencia por el impacto.

La ayuda llegó unos minutos después, encontrando inconsciente al oficial. Al brindarle auxilio y esperar a que recobrara la consciencia; los oficiales y paramédicos recién llegados solo podían escuchar con incredulidad el reporte de Samaniego.
Al ser entrevistado por las cámaras de una unidad televisiva que acompañaba a la policía, el aterrado oficial declaró lo siguiente:
“Era una mujer de ojos muy grandes sin pupilas, completamente negros y me veía amenazante. Sus manos o garras arañaban el parabrisas tratando de agarrarme. Vestía totalmente de negro y era como una capucha que traía en la cabeza y una capa con una bola detrás. Yo pedía refuerzos desesperado por radio mientras seguía en reversa tratando de huir de esta cosa pero ella seguía aferrada sobre el cofre de la patrulla y agarrando el parabrisas". 

Samaniego fue trasladado al Hospital Universitario, donde se le realizaron varios exámenes psicológicos y toxicológicos para establecer si su encuentro con la "bruja" se debía al consumo de sustancias tóxicas, alcohol o algún alucinógeno.
Pero todas estas resultaron negativas. La policía se encontraba desconcertada. ¿Qué había atacado a Samaniego, entonces? ¿Un ave de presa? ¿Algún maniático con disfraz? ¿Un fantasma?
La respuesta llegó en un video entregado a un canal local.
Un poblador de Monterrey presentó la evidencia, la grabación de un extraño humanoide sobrevolando los cerros cercanos a la ciudad. Y después de ello llegaron los reportes... un gran número de personas, entre ellos tres policías de Santa Catarina que dijeron haber visto a este ser desconocido desde hacia varios días.
De estos relatos, uno de los más espeluznantes fue el de Manuel Sifuentes, también policía, pero del municipio de Guadalupe. De acuerdo con el propio Sifuentes:
“Pues bueno, yo estaba saliendo de la base, era un 5 de enero, lo recuerdo bien porque era la víspera del cumpleaños de mi hija... De pronto vi que una persona volando en un palo como una escoba, así como las clásicas brujas, de pronto bajó bastante como si fuera sobre mí. Yo por instinto cerré mis ojos y sentí mucho frío, como si me hubiera metido en una nevera llena de hielo... no me agredió propiamente sino que sentí como si atravesara mi cuerpo, cuando abrí los ojos se estaba alejando, fue casi traumático”.

Hoy, más de diez años después de la primer aparición de la Bruja, hay infinidad de teorías sobre su identidad. No solo se habla de los usuales nahuales, brujas, fantasmas y demonios; si no también de alienígenas y seres sobrenaturales, e inclusive hay quienes notan que la descripción dada por Samaniego parece coincidir con el Mothman que aterrorizó a Point Pleasant en la década de 1960 y con el Monstruo de Flatwoods.

La bruja del cementerio.
Boceto basado en el encuentro de Garza.
Además de los encuentros de Samaniego y Sifuentes, también otro policía llamado Gerardo Garza Carvajal se topó con dos de estos seres en el Panteón de Santa Catalina. Según su descripción, primero encontró a una mujer vestida de negro, con plumas y zarpas negras; a la cual se le unió otra igual cuando Garza Carvajal intentó encerrarse en la caseta de vigilancia donde estaba esa noche.
Por la descripción, hay quien piensa que más que una bruja; podría tratarse de un animal desconocido, una especie de gigantesca lechuza o ave de presa.
La teoría del ave podría ganar credibilidad si se hace caso al reporte dado por Francisco Peña, trabajador de un rancho cercano al Panteón de Santa Catalina. De acuerdo con Peña, en las inmediaciones del cementerio se escucha a "guajolotes riéndose".

Los fantasmas de Gettysburg.

La batalla de Gettysburg.
Corría el verano de 1864 cuando la guerra civil americana rugía a su máximo y la victoria se encontraba en el horizonte para la Confederación, en especial tras una racha de victorias en el este. Robert E. Lee, confiado luego de ganar las batallas de Fredericksburg y Chancellorsville; le pidió al presidente Davis que retomaran el esfuerzo de invadir el norte.
Al hacer esto, llevarían la lucha lejos de la capital en Richmond y permitiría que los soldados confederados reabastecieran sus líneas de provisiones. Así pues, Lee comenzó a avanzar hacia el norte el 3 de junio, marchando por el valle de Shenandoah en dirección al norte de Virginia; pero el norte ya presentía que ocurriría algo con las fuerzas confederadas, y comenzó a movilizar a sus tropas hacia el sur.
El 30 de junio, las fuerzas rivales se encontraron en Gettysburg, un pequeño pueblo de Pennsylvania con poco menos de 2500 habitantes en ese entonces. La lucha se extendió por tres días, no solo por las colinas y bosques de las afueras; si no en las mismas calles de Gettysburg. Al final de esas 72 horas, la batalla de Gettysburg finalizó, y el tercer día pasó a la historia como el más sangriento de la guerra civil; pues casi una tercera parte de los hombres involucrados fallecieron durante la lucha.
El 4 de julio, Robert E. Lee se vio obligado a capitular. Su invasión del norte había fracasado: se encontraba lejos de las líneas de provisiones y además de ya no tener municiones, la Confederación no podía reunir los números suficientes para reemplazar las casi 28,000 bajas de la batalla. Esa tarde, Lee comenzó su retirada de Virginia, pero la reconstrucción de Gettysburg estaba lejos de terminar.

Las calles estaban cubiertas de cadáveres que ya comenzaban a apestar bajo el sol del verano en Pennsylvania. Los pobladores se quedaron con la extenuante labor de atender a los heridos, por lo que casas, negocios e iglesias se transformaron en hospitales de campo.
Un oficial del ejército federal describió la escena de la siguiente manera: "Cadáveres, hinchados al doble de su tamaño. Más bien, estallados. Cadáveres humanos recargados contra una reja, con los brazos extendidos al cielo y con horribles rostros de miradas fijas..."
Por todas las dantescas escenas transcurridas ese día, no debería ser extraño pensar que los espíritus de aquellos miles de muertos permanecen hasta el día de hoy en los edificios, campos de batalla y bosques de Gettysburg.

El perfume.
La calle principal de Gettysburg en 1863.
El primer reporte de fantasmas es aquél producido por un "olor fantasmal", el cual es particularmente fuerte en las calles principales de la ciudad. La historia dice que a las mujeres de la ciudad solo se les permitía caminar por las calles luego de las batallas si usaban un trapo de cocina impregnado de perfume, esto con el fin de no oler la peste producida por los cadáveres y la sangre.
En ciertos lugares todavía pueden percibirse estos aromas a canela, vainilla y flores durante altas horas de la noche.

Los fantasmas de la Universidad Gettysburg.
La universidad Gettysburg.
Durante la batalla de Gettysburg, la universidad local fue uno de los principales sitios de lucha en la ciudad. En aquel entonces, solo consistía de tres edificios de ladrillo que fueron convertidos en un refugio y hospital de campo para los heridos.
La sala Pennsylvania, un gran edificio que sirvió como dormitorio para estudiantes durante Gettysburg, fue capturado por los confederados para ser usado como cuartel por Robert E. Lee. Se dice que en sus salas y pasillos se pueden ver soldados dando rondas durante la noche.
Hay reportes de gente de sombras, gritos y lamentos; pero la historia más conocida fue aquella recopilada por el escritor Mark Nesbitt. En ella, dos administrativos del colegio se encontraban trabajando una noche en el cuarto piso del edificio, y a la hora de irse decidieron tomar el elevador para llegar a la planta baja.
Siu embargo, en lugar de llevarlos a su destino elegido; el elevador pasó de largo y llegó al sótano. Al abrirse las puertas, los hombres se quedaron helados: en lugar de una bodega, se encontraron con una sala de operaciones tal y como debía haber sido en 1863. Hombres heridos yacían sobre planchas y mesas, mientras que doctores y enfermeras manchados de sangre caminaban apresuradamente entre ellos.
Aterrorizados, intentaron presionar el botón del elevador para escapar de ahí. Justo antes de que las puertas se cerraran, una enfermera fantasmal los miró con expresión de súplica. 

Los espectros del campo de batalla.
Soldados muertos en el tercer día de la batalla.
Quizás el aspecto más famoso, y la fuente de todas las historias e incidentes sobrenaturales de Gettysburg es aquel asociado con el campo de batalla. A lo largo del campo hay un gran número de residencias que hoy pertenecen al Servicio Nacional de Parques de Estados Unidos y que están embrujadas; ya que la mayoría fueron convertidas en hospitales durante la lucha.
El primer lugar que debe mencionarse es una pequeña casa llamada la "Casa de George Werket"; donde se habla de una puerta en el segundo piso que jamás se puede cerrar. También se habla de alguien o algo que camina de lado a lado en el ático, como si una persona estuviese preocupada o nerviosa por algo.

La "Casa Hummelbaugh" está embrujada por el brigadier confederado William Barksdale, cuyos escalofriantes gritos aún pueden escucharse durante la noche. Antes de morir, fue visto tendido frente a la casa, don de un muchacho le daba agua con una cuchara. Barksdale supuestamente sigue gritando por las noches, pidiendo agua a un muchacho que hace muchos años pasó a mejor vida.
De Barskdale se dice también que cuando su esposa viajó a Gettysburg para recuperar los restos de su esposo y llevarlos a ser enterrados en Mississippi, iba acompañada por el perro de cacería favorita del viejo soldado. Cuando el animal estuvo frente a la tumba de su amo, se tiró al piso y comenzó a aullar durante toda la noche. 
Al día siguiente, pese a todos los intentos de la señora Barksdale de retirar al animal de la tumba, éste se rehusó y continuó en el lugar aún cuando los restos del soldado ya habían sido extraídos para ser enviados a Mississippi. Para quienes vivían cerca del cementerio, el perro se transformó en una imagen cotidiana durante los días siguientes; y muchos intentaron ofrecerle alimentos y agua sin éxito alguno. Al poco tiempo, el animal murió de sed y fue encontrado tendido sobre el sitio donde su amo fue enterrado por primera vez.
Con el tiempo, comenzó a circular la historia de que el perro fantasma aún aparecía en la granja Hummelbaugh, y que cada 2 de julio se puede escuchar un desgarrador aullido durante la noche, como si el perro fiel a Barksdale esperase todavía después de la muerte.

La "Granja Rose" es otro sitio que luego de la guerra fue convertido en un cementerio. Cientos de soldados de ambos bandos fueron enterrados cerca de la propiedad, aunque fueron exhumados durante noviembre de 1863 para ser enterrados en Arlington. De acuerdo con el autor Mark Nesbitt, una de los habitantes de la granja se volvió loca durante el proceso de exhumación luego de ver sangre escurriendo de las paredes de la casa.
En la década de 1930, los Cuerpos de Conservación Civil encontraron el diario de un trabajador de la granja Rose. El hombre volvía a su centro de trabajo unas semanas después de la batalla. Anochecía y dijo haber visto una extraña figura brillante cerca de las tumbas de los soldados caídos.

En adición a estas residencias, hay cientos de apariciones diversas en el campo de batalla: soldados fantasmas marchando en formación, jinetes que cabalgan por las noches y el ruido de la lucha en sitios como el prado donde tuvo lugar la carga de Pickett, las colinas de Little Round Top, Peach Orchard, Wheatfield y en especial el Cubil del Diablo.

El misterio del Cubil del Diablo.
El cubil del diablo.
El Cubil del Diablo es una formación rocosa donde tuvo lugar una terrible batalla durante el segundo día de la lucha en Gettysburg. Pero su reputación como un lugar extraño y sobrenatural tiene su origen muchos años atrás.
La zona fue un sitio de caza para los nativos americanos por siglos, y en ella se libró una guerra conocida como "la batalla de los Cuervos", donde muchos hombres perecieron. En 1880, el escritor Emmanuel Bushman realizó un reportaje donde hablaba de los sucesos paranormales y terroríficos que ocurrían en ella. Habló de que los primeros pobladores veían fantasmas indios, escuchaban el sonido de tambores por la noche e inclusive llegaron a ver bizarras ceremonias indias teniendo lugar entre las rocas.
Bushman escribió sobre que podría haber existido una tribu que habitó el sitio del Cubil del Diablo, y que creía que las rocas podrían haber sido alguna vez parte de una pirámide colosal la cual fue destruida por una fuerza irresistible. 
El nombre del lugar sigue siendo un misterio, aunque muchos creen que se debe a que la cueva siempre ha estado infestada por serpientes, y que el "Diablo" al que hace referencia el nombre no era más que una serpiente gigantesca que tardó muchos años en ser capturada.
Durante la guerra, el lugar se convirtió en una carnicería. Los cuerpos de los soldados confederados y de la Unión que quedaron ahí tirados durante la captura de ese sitio estratégico, tapizaban las rocas y los huecos entre estas; lo que llevó a que el sitio fuese renombrado como "el matadero".
Los confederados lograron capturar el cubil del Diablo, pero muchos de ellos se arrepintieron durante esa noche, pues al ordenárseles montar guardia; se encontraron con que el sitio era macabro y perturbador, como si algo además de los cuerpos de sus enemigos y compañeros, estuviese rondando por ahí.
Nadie sabe cuantos días los cuerpos del Cubil permanecieron sin enterrar, aunque se especula que algunos solo pudieron ser recuperados luego de semanas, y unos cuantos más simplemente fueron arrojados a las profundas grietas entre las rocas.
Tras la batalla de Gettysburg, no pasó demasiado tiempo antes de que las apariciones fantasmales comenzaran. La leyenda local narra que pocos meses después del final de la guerra civil, dos cazadores se perdieron en los bosques cerca del risco. Llevaban un rato dando vueltas en círculos cuando pudieron divisar la figura de un hombre de pie sobre las rocas; el cual les hizo señas con las manos para informarles a donde debían ir y después desapareció.

A comienzos de 1970, una mujer fue a la oficina del Servicio Nacional de Parques para pedir información sobre los supuestos fantasmas del campo de batalla. Los guardias del campo se apresuraron a preguntarle que porqué tanta insistencia, a lo que la mujer les contó que esa mañana había salido al prado para fotografiar los alrededores y que detuvo su auto cerca del Cubil. Mientras tomaba fotografías, tuvo la sensación extraña de que alguien estaba de pie a su lado.
Al voltear, se encontró con un hombre que describió como "un hippie", con largo cabello sucio, ropas rotas, un sombrero de paja y que no usaba zapatos. El hombre la miró y le dijo: "Lo que buscas está por ahí", y señaló hacia el Cubil. La mujer se dio la vuelta para ver de qué hablaba el vagabundo, y al voltear para preguntarle a qué se refería; el hombre ya había desaparecido.
Un mes más tarde, el mismo guardia forestal que escuchó el relato, fue visitado por otro fotógrafo que vino y le preguntó sobre fantasmas. De nuevo la historia del "hippie", lo que llevó al guardia a preguntarse quién sería ese fantasma.
Al investigar, se encontró con registros de un grupo de soldados que coincidía con la descripción dada por los fotógrafos. Durante la guerra, muchos soldados confederados en el Cubil eran soldados de Texas; que al vivir en la frontera más alejada de la civilización en ese entonces, no recibían tantas provisiones como los soldados de sitios cercanos, y por ello los "Wild Boys" se veían como vagabundos en el campo de batalla.
El fantasma ha sido visto varias veces desde entonces, y muchas personas que lo confunden con un actor en una representación de la guerra civil; se han tomado fotografías con él. Todos aquellos que lo han fotografiado llegan a casa y se encuentran con que al revelar el rollo, el hombre jamás aparece en las imágenes.
También se habla de jinetes que aparecen saltando entre las rocas, el crujir de las armas de fuego, gritos inexplicables, cánticos de guerra indios y docenas de fotografías con evidencia de actividad sobrenatural.

martes, 6 de octubre de 2015

La leyenda de la novia fantasma.

En el año 2005, Tim Burton estrenó la película conocida como The Corpse Bride ("El Cadáver de la Novia" en Latinoamérica), la cual se basaba en una leyenda rusa de los años 1800s. 
La leyenda de la Novia Fantasma comenzó como una historia de horror durante el siglo XIX en Rusia, cuando el Antisemitismo corría rampante y las jóvenes judías eran usualmente atacadas y asesinadas de camino a sus bodas para prevenir que tuvieran hijos.
Debido a la tradición judía de enterrar a una persona con la ropa que usaba al morir, indudablemente varias de estas chicas fueron enterradas usando sus vestidos de novias manchados de sangre.

"Hace muchos años existía un joven que vivía en una aldea en Rusia. Se iba a casar, así que un amigo y él se prepararon para viajar a la aldea donde vivía su futura novia; a dos días de distancia de su hogar.
La primera noche, decidieron acampar cerca de un río. El futuro novio encontró una ramita que sobresalía del suelo, y que parecía un dedo huesudo y largo. Bromeó con su amigo sobre el extraño dedo que salía de la tierra, y entre juegos y risas tomó el anillo de compromiso que guardaba en su bolsillo y lo puso en la ramita.
Luego hizo una danza judía de matrimonio a su alrededor, dando tres vueltas alrededor de la ramita, recitando sus votos del matrimonio mientras bailaba y el amigo reía. Pero los juegos terminaron abruptamente, cuando la tierra se cimbró y comenzó a temblar bajo sus pies.
En donde se había encontrado la ramita, ahora había un agujero. Y de él salía un cadáver putrefacto. Un muerto viviente  que apenas era un esqueleto del cual colgaban retazos de piel y que vestía con los restos de un viejo vestido de novia. Gusanos y arañas colgaban del velo y el cabello enmarañado en su cráneo.
Los hombres se quedaron paralizados por el miedo.

"Ah." Dijo la novia fantasma con voz espectral. "Hiciste la danza del matrimonio, dijiste tus votos y pusiste el anillo en mi dedo... ahora somos marido y mujer. Y demando mis derechos como tu esposa."

Aterrados por las palabras de la novia fantasma, los jóvenes corrieron hacia la aldea donde la novia del muchacho ya los esperaba para la ceremonia. Corrieron directamente hacia el rabino que oficiaría la ceremonia.

"¡Rabino!" Dijo el joven casi sin aliento. "Tengo una pregunta muy importante. Si por casualidad caminara por el bosque y me encontrara una raíz que pareciera un dedo saliendo de la tierra, y le pusiera una sortija de matrimonio y realizara la danza y los votos... ¿sería una boda real?"

Confundido, el rabino preguntó. "¿Conoces de una situación así?"

"Oh, no. No. Por supuesto que no. Es una pregunta hipotética."

Acariciando su larga barba en señal de meditación, el rabino dijo: "Déjame pensar".

Pero entonces, la puerta de la sinagoga se abrió de golpe por una ráfaga de viento helado y la novia fantasma entró al lugar.

"¡Clamo a este hombre como mi esposo! Pues él ha puesto esta sortija en mi dedo y pronunciado los solemnes votos del matrimonio." Bramó, agitando su dedo huesudo en dirección al supuesto novio.

"Este es un asunto muy serio. Debo consultarlo con otros rabinos." Dijo el rabino.

Pronto, todos los rabinos de las aldeas cercanas se reunieron en el templo. Conferenciaron, hablaron y tardaron mientras los jóvenes esperaban su decisión. Afuera, la novia fantasma esperaba, golpeando el piso con un pie esquelético y susurrando una y otra vez: "Quiero celebrar mi noche de bodas. Con mi esposo."

Estas palabras hicieron que cada vello en el cuerpo del joven se erizara, pese a que no hacía frío esa noche. Mientras los rabinos dialogaban sobre tan delicado asunto, la novia humana del muchacho llegó y demandó saber de qué se trataba todo ese escándalo. Cuando el prometido le explicó, la chica comenzó a llorar.

"¡Oh, mi vida está arruinada! ¡Todas mis esperanzas y sueños están destrozados! ¡Nunca me casaré ni tendré familia!"

Entonces los rabinos salieron y uno de ellos preguntó: "¿De verdad pusiste un anillo en el dedo, bailaste y diste los sagrados votos como se debe?"

Los amigos aterrados asintieron al unísono, y los rabinos volvieron hacia el interior de la sinagoga para hablar de nuevo. La novia viva lloraba amargamente, mientras que la novia fantasma ahora se vanagloriaba y alardeaba de su tan esperada noche de bodas.
Después de un corto tiempo, los rabinos salieron marchando solemnemente, se sentaron en círculo y anunciaron:

"Puesto que pusiste la sortija en el dedo de la novia fantasma, bailaste tres veces alrededor de ella y recitaste los votos del matrimonio... hemos determinado que esta es una boda adecuada. Pero también hemos decidido que los muertos no tienen jurisdicción sobre los vivos."

Hubo murmullos y suspiros por todos lados, en especial de la joven novia que respiró aliviada.
La novia fantasma, sin embargo, soltó un gemido desgarrador hacia los cielos.

"¡Ahí va mi última esperanza de una vida! ¡Nunca cumpliré mis sueños! ¡He perdido todo para siempre!" Entonces colapsó en el piso en una imagen patética. Nada más que un montón de viejos huesos envueltos en un vestido roto. Ahí, en el piso. Sin vida.

Sobrecogida con compasión hacia la novia fantasma, la joven novia se arrodilló y reunió el montón de huesos; envolviéndolos en la seda desgarrada y abrazándolos mientras cantaba en voz baja como si estuviese arrullando a un bebé.

"No te preocupes. Yo viviré esos sueños por tí. Viviré esas esperanzas por tí. Tendré esos hijos que tanto querías. Tendré suficientes hijos para las dos, y entonces podrás descansar sabiendo que nuestros hijos y los hijos de nuestros hijos serán cuidados y no te olvidarán."

Amorosamente, cerró los párpados de la novia fantasma y aún cargándola, marchó hacia el río; donde cavó una tumba para los huesos. Luego susurró.

"Descansa en paz. Viviré esos sueños por tí. No te preocupes. No te olvidaremos."

La novia fantasma sonrió llena de felicidad y en paz, como si supiera que podría vivir a través de esta joven mujer. Y la novia la cubrió, envolviéndola en el vestido y enterrándola; para finalmente colocar flores sobre la tierra fresca de la tumba.
Entonces, la novia volvió con su prometido y tuvieron una ceremonia solemne. Vivieron felices por muchos años, y todos sus descendientes supieron la historia de la novia fantasma para que ésta no fuera olvidada, ni tampoco la sabiduría y la compasión que le enseñó a la pareja."