La idea de un depredador submarino no solo incluye a cocodrilos, tiburones, pirañas y barracudas; si no que en muchas ocasiones conjura gigantescos cefalópodos emergiendo de las profundidades para enroscar sus tentáculos en torno a una víctima y arrastrarla a una tumba acuática.
La ciencia oficialmente reconoce a tres calamares más grandes que un humano adulto: El calamar colosal, con un cuerpo principal de más de tres metros de largo; el Galiteuthis Phyllura, con un máximo de hasta 2.75 metros; y el calamar gigante, con un cuerpo de dos metros y medio. Estas especies habitan en aguas profundas de regiones relativamente inhabitadas como el Mar de Ross en la Antártida o el océano alrededor de la península de Kamchatka, en Siberia.
Otra especie que de hecho representa un riesgo para el ser humano, es el calamar de Humboldt; que mide metro y medio de largo y es conocido como "El Diablo Rojo" entre los pescadores de la península de Baja California.
En términos de pulpos, la especie más grande es el pulpo gigante del Pacífico; el cual habita una amplia región que abarca la costa occidental de América del Norte y las aguas de Corea, Rusia y el Norte de Japón. Puede nadar hasta a dos kilómetros de profundidad y pesa hasta 71 kilogramos.
Como sabemos, la mayor cantidad (si no es que todas) las especies de cefalópodos habitan en agua salada; pero de vez en cuando emergen extraños reportes de pescadores y nadadores en lagos y ríos sobre encuentros con monstruosos pulpos y calamares que pueden alcanzar incluso dimensiones comparables a las de un caballo.
El pulpo de Oklahoma.
El primero de estos monstruos lacustres es el conocido como "El pulpo de Oklahoma", el cual habita los lagos Thunderbird, Oolagah y Tenkiller, donde hay amplias cifras de nadadores ahogados cada año.
La leyenda del pulpo de Oklahoma lo describe como un monstruoso cefalópodo de color rojizo oscuro, y del tamaño de un caballo. Algunos criptozoólogos defienden la existencia de este ser basándose en que algunos invertebrados marinos tienen la capacidad de adaptarse a vivir en ambientes de agua dulce, como por ejemplo medusas y cangrejos, así como algunas especies de tiburón. Por ello, no resultaría descabellado creer que un pulpo lograse sobrevivir en ambientes cerrados de agua dulce; en especial una especie introducida en lagos recientemente formados como el Thunderbird.
Octo-squatch, el Hombre Pulpo de Vizcaya.
En el verano de 1961, Arquímedes Sánchez, un conductor de tráiler; se encontraba conduciendo en los caminos montañosos del país Vasco cuando tuvo un encuentro con una criatura salida de las más febriles pesadillas de H.P. Lovecraft.
Sánchez se encontraba cerca de Puerto de Barazar cuando sus luces iluminaron algo en el camino, obligándolo a frenar ante la imagen de un ser que, al igual que Cthulhu; desafiaba las normas de la comprensión humana. Un monstruoso pulpo 'peludo' de 1.20 de alto, ojos redondos y brillantes, y con extraños tentáculos cubiertos de gruesa lana marrón. El conductor y su copiloto permanecieron observado al monstruo por varios minutos, hasta que Sánchez decidió acelerar y arrollar al ser.
Cerca de la media noche, la criatura finalmente salió del camino y desapareció tras un grupo de arbustos.
M'de Wakan, el Monstruo de Devil Lake.
La palabra "M'de Wakan" significa "Misterio" o "Espíritu Maligno" en el lenguaje de los Sioux, y es usado para referirse a un ser acuático misterioso que reside en Devil Lake, al norte de lo que hoy es Lincoln City, Oregon. Se dice que este extraño monstruo similar a un pulpo es responsable de varias muertes a lo largo de los años.
Devil Lake es un cuerpo de aguas salobres, oscuras y profundas que fue creado a raíz del deshielo de los glaciares nortamericanos durante el fin de la edad de hielo. Además de M'de Wakan, los indios Nakota también sugieren que en sus profundidades se encuentra un terrible carnívoro similar al plesiosaurio.
La leyenda más vieja respecto al M'de Wakan se origina en torno al hijo de un jefe nativo que armó un grupo de jóvenes guerreros con el fin de ir de cacería durante la noche. Se encontraban cruzando Devil Lake cuando su canoa de guerra comenzó a estremecerse y un montón de tentáculos emergió de las aguas, volteando el vehículo y jalando a los hombres aterrados bajo las aguas saladas del lago. Los indios que vivían cerca de la costa presenciaron el atroz accidente, y se dice que cada año en esa fecha, realizan un festival en el cual sacrifican animales como ofrenda al terror que vive bajo las aguas.
Cuando los primeros misioneros cristianos arribaron a las costas de Devil Lake, los Nakota les advirtieron que en el lago vivía el Unktizina, hijo del espíritu maligno Unk y la bestia reptiliana Unkcegi; el cual tenía el poder de traer consigo sequías y fuertes hambrunas.
El 4 de marzo de 1950, Marybell Allum, hija del sheriff local; descubrió un cadáver que había sido arrastrado a la orilla de una playa al oeste de Devil Lake. El cuerpo, que los pobladores llamaron "Viejo Peludo", pesaba casi media tonelada, medía 7 metros de largo y tenía un cuerpo "como de vaca" y nueve largas "colas".