miércoles, 25 de mayo de 2011

El Silverpilen - El Tren Fantasma de Estocolmo

El Silverpilen ("Flecha de Plata") es una leyenda urbana conocida en Estocolmo, Suecia; donde supuestamente, este tren espectral aparece por las noches a viajeros solitarios en las estaciones del metro de Estocolmo, y también puede ser visto surcando los túneles.
El Silverpilen es un tren de la serie C5, una máquina de 8 vagones construida y puesta en servicio durante los años sesenta, hasta que fue retirado del servicio en 1996. Y al ser un tren inusual y el único en su tipo durante casi treinta años, quienes lo llegaban a ver avanzando por la red del metro durante las noches, decían que venían un tren blanco y reluciente, casi espectral.
La historia tiene múltiples versiones; que van desde quien asegura que el tren solo es visto por trabajadores en la red del metro en túneles abandonados, otros que pasa después de la media noche a gran velocidad y solo para a veces para recoger pasajeros que jamás vuelven a ser vistos.
La historia más popular lo relaciona con la estación de Kymlinge, una estación incompleta de la línea 11 del metro de Estocolmo y que cuando el Silverpilen se detiene ahí, es exclusivamente para bajar a sus pasajeros espectrales. De ahí la frase "Solo los muertos se bajan en Kymlinge", medianamente popular entre los habitantes de la ciudad.

Mythos de Cthulhu no.4 - Shub-Niggurath, la Cabra del millar de crías

"¡Que se canten los elogios, y que la abundancia sea acordada a la Cabra Negra de los Bosques. ¡Iá! ¡Shub-Niggurath! ¡La Cabra de un millar de crías!"

-El susurrante en las tinieblas, H.P. Lovecraft. 1930.
Una de las figuras más reconocidas de los mitos de Cthulhu (junto con el Gran Cthulhu, Azathoth, Nyarlathotep y Yog-Sothoth); es Shub-Niggurath (también llamada Shubniggurath, Shup Nikkurath o Shup-Niggurath), una deidad de la fertilidad que pertenece a los Dioses Exteriores del panteón lovecraftiano.
Si bien la mayoría de las veces se le presenta como una deidad femenina, también ha llegado a ser llamada "El Carnero Negro del Bosque con un Millón de Ovejas", lo que le da una connotación masculina.
Si bien se le menciona por primera vez en una historia de 1928, jamás se le representa en las historias escritas por Lovecraft; y la mayoría de su desarrollo como figura literaria fue obra de otros autores de los Mitos como August Derleth, Robert Bloch y Ramsey Campbell.

Shub-Niggurath, la Gran Madre
De acuerdo a los textos de Lovecraft, Shug-Niggurath pertenecía a un círculo mítico totalmente separado de los Antiguos, mismo que incluía a Yig ("El Padre de todas las Serpientes"), Ghatanothoa, Rhan-Tegoth, y las blasfemias gemelas, Nug y Yeb.
Shub-Niggurath cuenta con templos en todo el mundo, por citar algunos en Yemen (en Irem, la ciudad de los Pilares) que comparte con Nug y Yeb; o un templo en el reino subterráneo de K'n-yan que solía ser de Tsathoggua y se había transformado en un altar para "Shub-Niggurath, la Gran Madre y esposa del Que No debe Ser Nombrado").
Shub-Niggurath también es confundida con Astarte, la consorte del demonio Baal en la mitología Semítica; y diosas de la fertilidad como Cibeles y la Coatlicue; ya que en la historia "Las Ratas en las Paredes" implica que la gran madre a quien venera el culto del Priorato de Exham no es otra más que Shub-Niggurath.
Astarte, esposa de Baal
El "Que no Debe ser Nombrado" es un ser también conocido como Magnum Innominandum, una frase que aparece en "El Susurrante en la Oscuridad", y que fue incluido en un encantamiento que Lovecraft escribió para "El Tambaleante de las Estrellas".
Entre los posibles candidatos para ser esta entidad se encuentra el extraño y misterioso Hastur, Yog-Sothoth o inclusive el dios serpiente Yig.

La Cabra Negra
Si bien a Shub-Niggurath se le asocia con el término "La Cabra Negra de los Bosques con un Millar de Crías", es posible que dicho ser sea una entidad totalmente distinta, pues de acuerdo con Rodolfo Ferraresi, "la cabra es la figura por la que Shub-Niggurath es venerada".
También, la Cabra Negra puede ser una personificación de Pan, mismo que a su vez representa a Satán en la forma de un sátiro; es así que, la Cabra Negra puede ser una forma masculina y terrenal de Shub-Niggurath, que usa para copular con sus seguidores... imagen que la conecta con el Baphomet de la iconografía judeocristiana.
Baphomet
Las Crías Oscuras de Shub-Niggurath
"Algo negro en el camino, algo que no era un árbol. Algo grande, negro y viscoso, solo ahí,
agachado con brazos pegajosos moviéndose y estirándose... vino reptando de la colina...
y era la cosa negra de mis sueños... esa cosa negra, pegajosa y viscosa similar a un árbol
que salía de los bosques. Se arrastró y sacudió sus cascos, bocas y brazos serpentinos."
-Robert Bloch, "Cuaderno hallado en una casa abandonada".

Las Crías Oscuras de Shub-Niggurath son monstruosidades negras como la noche, hechas de tentáculos y casi tan grandes como un árbol; con patas similares a las pezuñas de una cabra.
De sus cuerpos sale una masa de tentáculos en lugar de una cabeza, y hocicos cubiertos de saliva viscosa cubren sus flancos; dándoles una apariencia apenas similar a los árboles de los bosques donde habitan.
Aparentemente, estos seres tienen un olor a tumba abierta; y se les llama para presidir sobre ceremonias de los cultos.
Se les puede invocar con el libro de Eibon, y una oferta de sangre; y el ritual debe ser hecho específicamente en lo más profundo del bosque, en la hora más oscura de la noche y la víctima debe ser sacrificada en un altar de piedra. Las Crías actúan como emisarios de Shub-Niggurath al aceptar los sacrificios y la veneración de los cultistas, así como devorar a los no creyentes y diseminar la veneración a su madre por todo el mundo.

Pazuzu - El Señor del Viento Maligno

El nombre de Pazuzu tal vez le sea familiar al seguidor del cine de horror como el demonio que posesiona a Regan MacNeil en El Exorcista (1973); donde aparece con múltiples formas, siendo primero una estatua encontrada en Medio Oriente, luego como una figura llamada "Captain Howdy" que se comunica con Reagan por medio de una tabla oujia, y finalmente como un ser cadavérico de rasgos espeluznantes y a la vez, en el cuerpo de la pequeña Reagan.
Si bien el nombre y el demonio parecen haber sido creados para la película, un conocedor de mitología Asiria y Babilónica puede encontrar a Pazuzu (también llamado "Fazuzu" o "Pazuza") como una de las figuras malévolas más prominentes de dicha cultura; donde es el hijo del dios Hanbi; y funge como señor de los demonios del viento, representante del viento del sur, el portador de las tormentas y el causante de la sequía.
"Soy Pazuzu, hijo de Anu, soy rey de los demonios del aire que
desciende con fuerza de las montañas haciendo estragos".

La escultura más conocida de Pazuzu (ubicada en el museo del Louvre, y sirve como base para la imagen que se muestra de él en El Exorcista), lo muestra como una quimera con el cuerpo de un hombre, una cabeza de león, patas de águila, dos pares de alas de ave, una cola de escorpión y un pene de forma serpentina. Se le muestra también con la mano derecha apuntando hacia arriba.
Según la tradición Sumeria, Pazuzu es el demonio del viento del suroeste; una ráfaga del desierto que ocasiona sequía y hambruna durante las temporadas calurosas, y enjambres de langostas durante las temporadas lluviosas.
Al dios se le invoca mediante amuletos que combaten los poderes de su esposa, la maliciosa diosa Lamashtu, quien se creía causaba daño a la madre y al niño durante el parto. Así, Pazuzu actúa como un repelente contra espíritus malignos (a pesar de ser uno él mismo), y protege a la humanidad contra plagas y mala suerte.
En el año 1968, el antropólogo, arqueólogo e historiador William Lambert, identificó un hueso humano con una cabeza humana en Megiddo (el valle donde, de acuerdo con la biblia católica, se librará la batalla del Armageddon), y con una invocación Sumerio-Akkadiana.

Pazuzu en el Exorcista
El caso de Pazuzu como la figura antagónica del Exorcista, data de 1971, cuando se publicó la novela original de William Peter Blatty, sobre la posesión de la niña Regan MacNeil por un demonio, al cual se revela como Pazuzu posteriormente (aunque no de forma explícita, pues solo se hacen referencias sobre su estatua, descubierta por el padre Lankester Merrin en el norte de Irak).
Al final de la historia, Merrin y su ayudante, el padre Karras, acuden al hogar de la familia MacNeil, y ejecutan un exorcismo en Regan para expulsar al demonio de su cuerpo, no sin antes perecer los dos sacerdotes.
El demonio reaparece en "Legion", donde busca venganza por haber sido expulsado del cuerpo de Regan.
Pazuzu, alias "Capitán Howdy"
En el caso de la película, si bien la historia permanece casi intacta, en esta versión la posesión inicia cuando Regan inicia sesiones con una tabla oujia y le comunica a su madre que tiene contacto con un ser llamado "Capitán Howdy", quien más tarde resulta ser el demonio Pazuzu.
El rostro de Pazuzu en la película fue interpretado por la actriz Eileen Dietz, y si bien aparece solo por unos cuantos segundos durante toda la película (mayoritariamente en escenas rápidas y parpadeantes), resulta ser una de las figuras más icónicas del cine de horror.

martes, 24 de mayo de 2011

La Bestia de Montauk





El 12 de julio del año 2008, un grupo de jóvenes del área de Montauk, Nueva York, encontraron una extraña criatura que yacía muerta sobre la playa de Ditch Plains, a tres kilómetros al este del distrito del que toma su nombre.
La fotografía a color de la criatura fue expuesta con el título "El Sabueso de Bonacville", una parodia del libro de "Sabueso de los Baskerville", de Sir Arthur Conan Doyle; y "Bonackers", la forma en que se les llama a los nativos del East Hampton.
En el artículo se especuló que la criatura tal vez era una tortuga de caparazón blando, un animal desconocido e incluso un experimento que hubiese escapado del Centro de Enfermedad Animal de Plum Island. Si bien la criatura resulta extraña y de apariencia alienígena, un análisis a fondo revela que no es más que un animal común y corriente.



La fotografía original
Una criatura sin pelo, una especie de "pico" y rasgos que no asemejan a los grandes carnívoros norteamericanos (osos, lobos, coyotes, pumas, linces, etc); y entre las hipótesis sobre su identidad se manejó la de un Chupacabras, una criatura marina desconocida, un experimento animal de Plum Island e incluso una especie previamente sin identificar de monotrema.
Eso, hasta que Larry Penny, el director de Recursos Naturales de East Hampton concluyó que la criatura era un mapache al que le faltaba la parte superior del hocico.
Análisis del cadáver
Los rumores sobre la criatura se expandieron una vez que el cadáver fue removido por autoridades desconocidas, y otros especifican que para cuando se condujo la investigación mediática, el cadáver ya se había podrido hasta quedar hecho un esqueleto.
El Criptozoólogo Loren Coleman de la página Cryptomundo fue quien nombró a la criatura como el "Montauk Monster" el 29 de Julio del mismo año.

Nekomata- El Gato Monstruo

El Nekomata ("gato bifurcado") es una criatura del folklore japonés con poderes sobrenaturales en la misma tradición del Kitsune o el Tanuki, aunque de una naturaleza netamente malévola.
Se le conoce también con el nombre de Bakeneko ("gato monstruoso"), y se cree que es un gato que ha vivido más de cien años o al que se le ha permitido mantener una cola larga; y es por esto que la cola se le secciona y entonces obtiene el nombre de Nekomata.
Al volverse un Nekomata, el gato se tranforma en un ser malévolo que embruja la casa en la que vive; creando bolas de fuego fantasmales, acechando a los habitantes mientras duermen, parándose en sus patas traseras, convirtiéndose en un humano e inclusive de forma perturbadora, devorar a su propia ama (en el caso de tenerla) para convertirse en ella y usurpar su lugar.
Un Nekomata puede alcanzar el tamaño de un leopardo, y también se le da el poder de revivir a los muertos al saltar sobre los cadáveres frescos.
Al Nekomata se le atribuye el origen del Gato Colacorta Japonés, pues entre múltiples leyendas inspiradas por el terror de que un gato con cola larga se transforme en una de estas criaturas, existe una en particular que narra que una vez, a un gato se le encendió la cola por error y corrió por la ciudad quemando muchísimos edificios. En retribución, el Emperador de Japón decretó que todos los gatos debían de tener cola corta.

Si uno busca en las leyendas concernientes a estos seres, las más populares narran la transformación de estos seres en humanos, particularmente en mujeres. Por ejemplo, la de Takasu Genbei...
 La madre de Takasu Genbei
La madre de este hombre cambió drásticamente su personalidad luego de que su gato desapareciera. La mujer comenzó a volverse huraña y a comer sus raciones en la soledad de su habitación; cosa que extrañó a sus familiares, y al espiarla, encontraron a un gato monstruoso usando la ropa de la madre y devorando cadáveres animales.
Takasu aún escéptico, asesinó a la criatura, y un día su gato desaparecido volvió, transformándose en su madre.
Espeon, un popular Pokémon basado en el Nekomata
Aún así, no todas las historias de los Nekomata los presentan como seres malévolos, pues existen variaciones de la historia que ligan a este ser con la leyenda del Maneki Neko, un gato conocido por ser señal de buena fortuna ecónomica (los negocios en Japón usan al Maneki Neko como un amuleto).
Este es el ejemplo de "Tama", un Nekomata perteneciente a un pobre sacerdote que vivía en el templo de Setagaya, al oeste de Tokio. El Sacerdote le decía a Tama, "Te mantengo a pesar de mi pobreza, así que, ¿porqué no haces algo por este templo?"
Cierto día; Naotaka, señor del distrito Hikone, estaba de pie bajo la lluvia para resguardarse de la lluvia, cuando se encontró con un gato invitándolo a pasar a la puerta de un templo. Conforme se acercó, el árbol donde había estado parado se incineró por un relámpago. Luego de eso, Naotaka se volvió amigo del sacerdote y donó muchísimo dinero para que el templo fuese reconstruido.
Al morir Tama, el sacerdote construyó una tumba para el gato, y eventualmente se le construyó un altar al "gato invitador". El Templo de Gotokuji aún existe hasta estos días.
El templo de Gotokuji y el altar a Tama
 Otra historia habla de una vieja y pobre pareja que tenía un pequeño gato. Al no poder tener hijos, trataban al gato como su propio niño. Y, una vez, al enfermar el viejo, una mujer misteriosa apareció en el umbral de su puerta, clamando ser el gato y jurando que les pagaría todas las atenciones que tuvieron con ella. Le otorgó una gran fortuna a la pareja, y en algunas versiones del cuento, ellos simplemente se conformaron con tener una hija.
Uno de sus admiradores vio su forma verdadera y ella le rogó que no dijera, más unas dos semanas después, el hombre rompió su promesa y le contó a un pescador y a los pasajeros de una nave lo que había visto. De inmediato se desató una tormenta y la mujer apareció sobrevolando los cielos, para luego convertirse en un gato gigantesco y asesinarlo.
En algunas variaciones del mito, el Nekomata puede entrar y manipular los sueños (Espeon, el Pokémon basado en el Nekomata, es uno de los monstruos de tipo 'Psíquico'); como en una historia donde el gato entra al sueño de su dueña, indicándole que fabrique una imagen suya en arcilla para darle suerte (el mito del Maneki Neko de nuevo).
Otras historias dicen que un Nekomata puede transformarse en una chica hermosa, para que su dueño pueda casarse con ella y tener hijos.
Y, muchas veces, el Nekomata puede resignarse a volverse un humano y vivir una vida normal. Otras, tiende a usurpar el lugar de una persona amada para matar a su objetivo...

domingo, 8 de mayo de 2011

Leyendas de Oaxaca

La siguiente información fueron varias historias enviadas por un lector del blog.

La Carroza.

Cerca de un pueblo llamado Río Grande, se escuchan los sonidos de cascos de caballo jalando una carreta antigua, y como todas las historias, a media noche. Cuentan las voces que, durante una fiesta a fin de año, la gente que estaba en la calle escuchó la carreta; y extrañados por el hecho de que nadie en el pueblo tenía un vehículo de ese estilo, se quedaron ahí y vieron que a la carreta la jalaban dos caballos de tipo holandés: grandes y negros.
El chofer era un hombre vestido de negro con un gran sombrero que ocultaba su cara, y acompañado de un típico olo a azufre en esta clase de apariciones. Es en ese momento que una señora de edad avanzada gritó "¡Es la cosa mala!", y suponiendo que era el diablo, todas las personas se ocultaron, más una madre olvidó a su hijo en el caos de la huida.
La carroza continuó su paso y desapareció, momento en el que encontraron en la calle las ropas del niño abandonado.
La madre, consternada por lo ocurrido con su hijo, fue a hablar con el padre de la iglesia del pueblo y éste les recomendó poner un espejo en la calle para cuando pasara de nuevo la carreta.
Así, la madre esperó hasta la media noche, y dejó el espejo en la calle en cuanto escuchó los cascos de los caballos a lo lejos. Así cuando la carroza pasó sobre el espejo, se comenzaron a escuchar gritos y lamentos desgarradores por un buen rato; y, al finalizar la cacofonía infernal, solo se escuchó el llanto de un bebé.
En medio de una nube de humo se escuchó el llanto de un bebé, y quienes estaban ahí encontraron al niño llorando en el suelo junto al espejo, roto y con marcas de quemaduras.

El Sombrerudo
El sombrerudo es una figura similar al charro negro o al catrín, figuras a las cuales se les llega a asociar con la aparición del demonio en la provincia mexicana.
La historia ocurrió en una secundaria del estado de Oaxaca, en el cual durante un día común y corriente se encontró a una chica desmayada en la parte posterior de los salones, y al lograr despertarlo ella solo se limitaba a decir que "había visto al sombrerudo trepado en un mangal"., desmayándose al ver a tal criatura. El Sombrerudo es, supuestamente, la variante masculina de la Matlazihua y puede confundirse con el charro negro o el catrín, y tiende a aparecérsele a las mujeres a media noche o por parajes que transitan con el propósito de "asustarse".

Los "Juanitos"
En Oaxaca se da un tipo de hongo alucinógeno muy especial, el cual, solo se consume en situaciones en las que se busca encontrar algún objeto perdido. La historia narra que una niña iba a salir del pueblo con su familia, pero había perdido un huarache y tras perder demasiado tiempo buscándolo, escuchó la historia de boca de los adultos sobre las propiedades del supuesto hongo. Lo buscó y lo consumió con rapidez, viendo en su alucine a unos seres pequeños que se hacían llamar "Juanitos", que solo se aparecían al comer el hongo.

Mythos de Cthulhu no.3 - Nyarlathotep, el Caos Reptante

"Nunca había escuchado el nombre de Nyarlathotep anteriormente, pero parecía ser 
capaz de entender la alusión.
Nyarlathotep era una especie de hombre de espectáculos itinerante, o un catedrático que hablaba
en salas públicas y desataba el miedo y la discusión con sus exhibiciones. Estas exhibiciones
consistían de dos partes - primero, un horrible -quizás profético - cortometraje de cine,
y luego algunos experimentos extraordinarios con aparatos científicos y eléctricos.
Conforme recibí la carta, recordé que Nyarlathotep ya estaba en Providence... y parecía
recordar que las personas me susurraban al ver con incredulidad sus horrores, y me
advertían de no acercarme a él. Pero la carta soñolienta de Loveman me hizo decidirme...
Y conforme dejé la casa, ví multitudes de hombres moviéndose por la noche, todos
susurrando con terror y avanzando en una dirección. Fui con ellos, asustado y a la vez
interesado por escuchar al grande, al oscuro e indecible Nyarlathotep."

-Descripción de un sueño de H.P. Lovecraft, 1921.

De todos los Dioses Exteriores y Antiguos de los mitos de Cthulhu, Nyarlathotep es quizás el más interesante. A diferencia de la mayoría como Hastur, Yog-Sothoth y Azathoth, que viven en estrellas distantes; o Cthulhu y Tsathoggua, durmientes; Nyarlathotep permanece activo y frecuentemente camina por la Tierra.
Nyarlathotep es descrito como un hombre alto, delgado y alegre; pero en realidad tiene miriadas de formas, la mayoría de ellas incomprensibles para la mente humana. Y, a diferencia de otros Dioses, Nyarlathotep es más una especie de mensajero y propagador de los cultos de las entidades lovecraftianas.
De igual forma, en lugar de ser una entidad ignota o relativamente caótica como los demás Dioses, Nyarlathotep es un ser definitivamente cruel, que se deleita con la crueldad, es engañoso y manipulativo, y muchas veces se dedica a usar a múltiples seguidores para lograr sus objetivos; es, de forma extraña y a la vez más perturbadora, el Dios Exterior más similar a los humanos.

Nyarlathotep actúa como un mensajero para los Dioses Exteriores, y es el fiel sirviente de Azathoth. Y, a diferencia de otras deidades que buscan la muerte y la destrucción, Nyarlatothep es partidario de causar la locura en donde quiera que pasa, y de hecho, se sugiere que Nyarlathotep es quien causará la extinción de la raza humana al final.

Varios conocedores de los mitos de Cthulhu especulan que es Nyarlathotep quien introdujo al hombre al avance tecnológico del armamento en las guerras mundiales y el desarrollo de la bomba atómica. Y también, es posible que Lovecraft se haya inspirado en Nikola Tesla, un científico que daba cátedras acompañado por experimentos eléctricos, y sobre quien se rumora creó múltiples inventos catastróficos que podrían haber sido la causa de eventos como el ocurrido en Tunguska en 1908.

Avatares de Nyarlathotep.
A diferencia de dioses como Cthulhu, Shub-Niggurath o Tsathoggua, Nyarlathotep aparece bajo una multitud de formas en diversos lugares del planeta y el cosmos. Si bien prefiere adoptar forma humana para hablar con sus posibles seguidores e infundir el pánico, tiende a usar formas más monstruosas para propagar la locura.
El Faraón Negro
Aparece como un faraón egipcio de piel oscura y portando ropas brillantes. Fue valorado como un verdadero faraón en Egipto, y es en esta forma en que es venerado por la Hermandad del Faraón Negro, un culto liderado por un descendiente egipcio. Este culto tiene conexiones múltiples a la Iglesia de la Sabiduría Estelar, el Culto de la Lengua Sangrienta y la Hermandad de la Bestia. Incluye también un subgrupo llamado Hijos de la Esfingue, que se especializa en embalsamar momias con cabezas de animales.



"Y fue cuando Nyarlathotep vino de Egipto. Quién era, nadie pudo decirlo, pero era de la vieja sangre nativa y se veía como un fararón. Los fellahin se arrodillaron al verlo, sin saber porqué. Dijo que había salido de la oscuridad de veintisiete siglos y que había escuchado mensajes de lugares fuera de este planeta. Y a las tierras de la civilización vino Nyarlathotep, moreno, delgado y siniestro, siempre comprando extraños instromentos de vidrio y metal, y combinándolos en instrumentos aún más extraños. Hablaba de las ciencias - de la electricidad y la psicología - y daba demostraciones de poder que dejaban sin habla a sus espectadores, incrementando su fama a una magnitud enorme. Los hombres avisaban uno al otro para ver a Nyarlathotep, y temblaban. Y donde Nyarlathotep iba, el sueño se desaparecía, pues las pocas horas se llenaban con los gritos de una pesadilla."
-H.P. Lovecraft, Nyarlathotep.
Ahtu
Aparece como una masa gelatinosa con multitud de tentáculos dorados. El culto de Ahtu en el Congo se encuentra formado por adoradores humanos llevados a la locura al ser esclavizados y explotados por gobernantes y jefes tribales. Todos los miembros de este culto en África tienen amputaciones y cicatrices de golpizas y heridas de látigo. Aunque, el culto en el Nuevo Mundo se asemeja más a la práctica de vudú de los houngan de Haití. A esta manifestación del caos reptante se le puede llamar con un brazalete dorado mágico que se mantiene separado en dos mitades para evitar la invocación errónea.

La Mujer Hinchada
Un avatar que se manifiesta en China, concretamente en Shanghai. En esta forma, Nyarlathotep aparece como una doncella delgada y hermosa que oculta el rostro tras un abanico. Sin embargo, el abanico oculta su verdadera forma, pues una vez que lo retira revela su forma verdadera: una bestia humanoide, colosal e hinchada que devora cerebros. En esta forma es venerada por la Orden de la Mujer Hinchada.

Mr. Skin
Un avatar que aparece en Los Ángeles, California. Asemeja a un proxeneta alto, de color plateado y sin rostro. Se le asocia frecuentemente con cultos de la fertilidad dedicados a Shub-Niggurath.
El Morador de la Oscuridad
También conocido como el Devorador de Rostros, El Padre de todos los Murciélagos, Ala Oscura, Murciélago de Arena y la Luz que Vuela; este avatar de Nyarlathotep es sumamente importante para el culto de la Iglesia de la Sabiduría Estelar, quienes pueden invocarlo mediante el uso del Trapezoedro Brillante.
Es también venerado por los aborigenes australianos.
Aparece como un murciélago gigantesco con un enorme ojo trilobular. Sus enormes alas contienen tentáculos que se agitan bajo ellas, y deja un rastro de burbujas al moverse. Esta forma también es capaz de atravesar objetos materiales a voluntad, y es incapaz de soportar la luz; por lo que tiende a volar en el espacio usando esta manifestación.
Es un ser que otorga a sus adoradores la capacidad de poder ver en la oscuridad, aún si no cuentan con ojos, pues es una mera actividad psíquica producida por los poderes del enorme murciélago.
El Dios Sin Rostro
Aparece en Egipto como otra manifestación, una similar a una enorme esfinge sin rostro con el poder de otorgarle a sus adoradores la capacidad de viajar en el tiempo.
El Aullador de la Oscuridad
Un avatar que se manifiesta en el bosque de N'Gai. Nyarlathotep aparece como un enorme gigante que aúlla, con un enorme tentáculo similar a una lengua en lugar de rostro, el cual chorrea sangre. Es en esta forma que es venerado por el Culto de la Lengua Sangrienta, quien le llama "El Dios de la Lengua Sangrienta".

Xipe Totec, el Desollado
Venerado por los Aztecas como Xipe Totec ("Nuestro desollado señor"), este avatar aparece como un cadáver sin piel, También es venerado por un culto atroz en Turquía.
Tezcatlipoca
Venerado por los Aztecas como "El Espejo Humeante", Tezcatlipoca es descrito como un dios de tez oscura, similar a varios avatares de Nyarlathotep, tanto el Hombre Negro de Europa como el Faraón Negro de Egipto.
A Tezcatlipoca se le representa como un enorme jaguar, similar a como El Dios Sin Rostro es una esfinge sin cara, alas de buitre y cuerpo de hiena; estableciendo semejanzas de estos dioses con representaciones basadas en animales depredadores asociados a la muerte en sus respectivas culturas (el jaguar era un animal visto como una fuerza de la vida y la muerte para los aztecas; y tanto la hiena como el buitre son conocidos como animales carroñeros).