Panorama de la Ciudad de México al anochecer.
A motivo de celebración de la entrada número 500 de este blog, se ha preparado una versión corregida y mejorada de la guía anterior sobre fantasmas de la Ciudad de México y áreas conurbadas. Incluye información recopilada de varios sitios, videos, relatos encontrados en internet y libros que hablan sobre el tema.
A manera de advertencia; algunos de estos lugares son propiedad privada o se encuentran en condiciones de abandono que imposibilitan la exploración urbana y presentan un riesgo, además de que como ocurre con todas las leyendas de fantasmas; no existe una forma fidedigna de corroborar la información. Este blog no se hace responsable de las repercusiones médicas, legales o paranormales ocasionadas por introducirse en las construcciones aquí descritas.
Los Espectros de las Tres Culturas, Conjunto Habitacional Nonoalco-Tlatelolco.
Plaza de las Tres Culturas, Tlatelolco.
La zona hoy conocida como Tlatelolco, en la delegación Cuauhtémoc, tiene su origen en el año de 1337 al ser fundada como una de las múltiples ciudades del Lago de Texcoco; independiente a Tenochtitlán hasta el año de 1473, cuando el Huey-Tlatoani Axayácatl la conquistó.
Durante la conquista española, Bernal Díaz del Castillo se maravilló de la riqueza y la gran población de Tlatelolco; en entonces el corazón comercial del Imperio mexica con un mercado que servía a más de veinte mil personas por día y donde se vendían bienes como gemas, plumas de quetzal, pieles, esclavos y otros altamente valuados por los nobles mexicas. La ciudad de Tlatelolco fue uno de los últimos bastiones de resistencia en la conquista, siendo destruida el 13 de agosto de 1521.
En 1527, se construyó la iglesia de Santiago sobre las ruinas de los templos de Tlatelolco; así como el Colegio de la Santa Cruz de Tlatelolco, uno de los primeros institutos de educación superior en el continente Americano.
En la década de 1960 se construyó el proyecto habitacional Nonoalco-Tlatelolco, así como el metro del mismo nombre, el edificio de Banobras y el antiguo edificio de la Secretaría de Relaciones Exteriores. En 1967, se firmó el tratado de Tlatelolco entre varios países del continente; buscando la no proliferación de armas nucleares en el Caribe y Latinoamérica.
Desgraciadamente, Tlatelolco es tristemente reconocida en el mundo no por su valor arquitectónico en el México post-revolucionario o los acuerdos anti nucleares; si no por el evento acaecido el 2 de Octubre de 1968.
Tlatelolco el 2 de Octubre de 1968.
Ese día, cientos de estudiantes resultaron víctimas de una emboscada tendida por el Batallón Olimpia del ejército mexicano con el fin de silenciar una revuelta estudiantil a tiempo para evitar que se perturbaran los Juegos Olímpicos de ese año. Oficialmente no hay un número de víctimas, aunque se cree que va de entre doscientos hasta mil quinientas personas, con otro más de desaparecidos.
Casi veinte años después, el 19 de Septiembre de 1985; la Ciudad de México fue estremecida por un terremoto de ocho grados en la escala de Richter, ocasionando el colapso del Edificio Nuevo León; uno de los más grandes del conjunto habitacional y en el que perdieron la vida decenas de habitantes.
Ruinas del Edificio Nuevo León, Septiembre de 1985.
Por esta cruel historia, existen infinidad de relatos sobre apariciones sobrenaturales en la zona; misma en la que se respira un aire pesado, descrito como 'aire viejo' por algunos y se tiene la sensación de ser observado en los múltiples corredores del conjunto habitacional. Los relatos, que no son pocos y han sido cubiertos por programas de televisión; hablan de sombras que se mueven entre los edificios al caer la noche, sonidos de niños inexistentes que juegan entre los pasillos y escaleras de los edificios en torno a la plaza; sangre sobrenatural que escurre por las escaleras en los días lluviosos, personas que corren por la plaza y desaparecen al llegar a la iglesia de Santiago como si pidieran asilo; e incluso, algunos sugieren que los gritos, disparos y los pasos apresurados de la noche del 2 de octubre reverberan en cada aniversario.
Otros más, han dicho escuchar gritos pidiendo ayuda como si se tratara de gente atrapada bajo los escombros de un edificio que no existe desde hace más de treinta años.
De emperadores, tías asesinas y animales fantasmales - Bosque de Chapultepec.
Panorámica aérea del Bosque de Chapultepec, con el castillo en primer plano.
El bosque de Chapultepec, un espacio abierto en el corazón de la Ciudad de México que funciona como el pulmón más importante de la urbe; no es solo un espacio artístico, cultural y recreacional; sino uno de los lugares más ricos en historia del país.
Ha sido hogar de descanso para los señores mexicas, en él se construyó un castillo donde vivió el último emperador de México y se libraron batallas, entre ellas una que inmortalizó a los jóvenes cadetes del colegio militar durante la invasión Estadounidense de 1847. En 1940, se levantó en él la residencia del presidente de México, Los Pinos; y entre las tres zonas que lo conforman se encuentran sitios turísticos importantes como el Museo de Antropología, el ya mencionado Castillo de Chapultepec, el Zoológico Alfonso L. Herrera (donde se ha logrado reproducir exitosamente al panda gigante), el Museo Rufino Tamayo y muchos otros.
Y por esta historia e importancia que el bosque está lleno de relatos que van desde lo chusco hasta lo grotesco. Desde manadas de perros salvajes antropófagos a ardillas con rabia, asesinos seriales, cadáveres de corredores descubiertos en cañadas apartadas y escapes de animales del zoológico; no hay un área del parque que no cuente con algún elemento horrorífico. El escritor José Emilio Pacheco escribió un cuento mitad novela negra y mitad cuento de horror situado en Chapultepec, "Tenga para que se entretenga"; en el que narra la desaparición de un niño rico a manos de un misterioso hombre con rasgos de caracol y el horror de un investigador privado al seguir el caso.
Sala del interior del museo del castillo de Chapultepec.
La pieza central y corona del bosque, el Castillo de Chapultepec; cuenta con testimonios de encuentros con lo paranormal por parte de visitantes y trabajadores por igual. Cadetes fantasmales que continúan montando guardia a casi doscientos años de la batalla donde perdieron la vida, pisadas y conversaciones en sus lujosos salones, puertas que se abren y cierran solas, e incluso el piano de la emperatriz Carlota tocando por sí mismo a altas horas de la noche. Algunos más declaran haber visto sombras y figuras espectrales entre las que se incluye la regia presencia del Emperador Maximiliano de Habsburgo.
El Zoológico, también cuenta con historias de fantasmas que hacen temblar a los habitantes salvajes de la exhibiciones. Hace más de una década, en pleno auge del programa radiofónico "La Mano Peluda"; el locutor Juan Ramón Sáenz recibió la llamada de un ex-guardia de seguridad del Zoológico de Chapultepec; que contaba que durante las noches había una presencia que enloquecía a los animales y que recorría los pasillos y caminos restringidos para el público. El guardia procede a reproducir una grabación, donde además de escucharse los rugidos y gruñidos de un oso polar; pueden percibirse gemidos y el ruido de cadenas siendo arrastradas.
Acceso al Zoológico de Chapultepec.
Otro punto 'famoso' por así decirlo, es la famosa Casa de la Tía Toña; con historias usualmente acompañadas por la fotografía de una ominosa casona blanca en medio del bosque. La leyenda reza que la tía Toña era una anciana que vivía sola y que al no tener hijos o casarse, decidió adoptar a varios jóvenes en situación de calle para brindarles un hogar. Sin embargo, la anciana altruista con el tiempo se dio cuenta de que muchos de estos jóvenes eran bastante maliciosos, y sus actitudes groseras y criminales terminaron sacándola de quicio. Una noche, ya fuera de sí, la anciana arremetió contra ellos y los mató a hachazos; para después ir y encerrarse en la habitación más lejana de la casa, donde murió junto a todas sus riquezas. Se dice que la casa, perdida en algún punto de la tercera sección; está maldita y que se puede ver al espíritu de la anciana desde las ventanas. Otras versiones de la leyenda sugieren que nadie que haya entrado en busca del dichoso tesoro de la tía Toña ha vuelto a salir con vida, debido a lo extremo de los sucesos paranormales que se suscitan en ella.
Supuesta fotografía de la casa de la tía Toña.
En realidad, la fotografía que tiende a acompañar la historia es una propiedad privada perteneciente a un político mexicano; por lo que se considera que la leyenda de la tía Toña es un mito. Aunque claro, siempre existe quien asegura que la casa es real y se ubica en alguna de las cañadas o riscos que pueblan la tercera sección. Mismas cañadas donde, de acuerdo con algunos deportistas que acuden a hacer ejercicio por las mañanas; pueden escucharse tenues gritos de auxilio entre la espesura a los lados del camino.
La Moira - La casa embrujada de la Colonia Chapultepec.
Centro experimental de cultura, La Moira.
Cerca del bosque se encuentra "La Moira"; un domicilio de aspecto tétrico que lo mismo ha servido de centro cultural que de sitio para sesiones espiritistas, y que hoy yace abandonada.
El nombre de la casa proviene de Las Moiras, personificaciones del destino en la mitología griega. Las Moiras: Átropo, Cloto y Láquesis; eran divinidades femeninas con la función de contar el tiempo de vida de los mortales, decidiendo terminarlas al cortar un hilo.
En el caso de la edificación, la leyenda inicia en la década de 1970 con un niño de nombre Marcos; quien por curiosidad o malicia, decidió explorarla. Se dice que una vez dentro, Marcos experimentó toda clase de sucesos paranormales al recorrer los dilapidados pasillos y habitaciones; pero fue la aparición de un niño ahorcado, colgando de una viga en el techo, la que finalmente lo hizo salir huyendo despavorido.
Perseguido por la imagen del niño colgante por gran parte de su vida, se dice que ya de adulto Marcos volvió a la Moira para enfrentar sus miedos. No se sabe exactamente qué pasó en el interior de la casona, lo que sí queda claro, fue que el cuerpo de Marcos fue hallado a la mañana siguiente por los vigilantes de la propiedad; colgado en la misma habitación donde él insistía haber visto al niño ahorcado.
Las personas que habitan los domicilios cercanos a La Moira, sobre del circuito interior José Vasconcelos; aseguran que la casa guarda una extraña vibra, y que no es raro captar fenómenos paranormales al pasar a su lado: gente que observa por las ventanas, sombras que se mueven en su interior, ruidos de mobiliario inexistente siendo arrastrado por el suelo e incluso conversaciones en voz baja; todo en una casa que lleva años abandonada.
De La Moira, lo único que se sabe es que no se puede habitar ni reutilizar, pues incluso el intento de convertirla en un Centro Cultural terminó mal, por lo que cerró al poco tiempo de ser abierta. En la actualidad, se puede acudir a recorridos nocturnos para amantes del misterio; donde según algunos, se han realizado sesiones espiritistas bastante violentas, grupos enteros han sido ahuyentados por presencias invisibles y que inclusive en una ocasión llegó a ocurrir una posesión demoniaca.
Edificio Rio de Janeiro - La Casa de las Brujas, Colonia Roma.
Edificio Río de Janeiro, "Casa de las Brujas".
En el corazón de la moderna y cotizada colonia Roma, existe una construcción que sobresale de las demás por su elegante y a la vez extraña estética arquitectónica. La mansión, cuyo nombre oficial es "Edificio Rio de Janeiro"; secreta un aura de misterio por las leyendas en torno a ella.
Construida por orden de Porfirio Díaz para celebrar el centenario de la Independencia en 1910, la intención original del edificio era servir como un hotel de lujo para huéspedes extranjeros y de alta alcurnia; y originalmente contaba con un paso para carrozas en la calle de Durango. El edificio fue remodelado en 1942 y parcialmente abandonado por resultar ligeramente dañado durante el terremoto de 1985.
El edificio se volvió famoso por ser el hogar de "Pachita"; una curandera proveniente de Chihuahua que obtuvo un gran renombre por operar a pobres y ricos, vecinos, políticos y artistas con la ayuda de espíritus; entre los cuales de acuerdo a Pachita, se encontraba el emperador azteca Cuauhtémoc. Pachita se refería a Cuauhtémoc como "El Hermanito"; quien la poseía y guiaba con una gran precisión para realizar operaciones donde de acuerdo con algunos testigos, Pachita podía materializar órganos nuevos de un frasco sin explicación.
Pachita se volvió asesora de personajes públicos, políticos, famosos y otras personas de clase alta luego de la revolución; y que acudían a ella en busca de trabajos, rituales, curaciones e incluso invocaciones de seres de ultratumba.
Luego de su muerte, los vecinos del edificio aseguran que Pachita continúa habitando los corredores, escaleras y algunos departamentos; pues no es raro escuchar sonidos, ver apariciones e incluso encontrarse con el alma de la anciana sanadora. Como un caso interesante, hace más de una década hubo una llamada al programa radiofónico "La Mano Peluda"; en la cual una joven de nombre Brenda decía que en su departamento en la Casa de las Brujas se aparecía un gran número de entidades demoniacas, manifestándose en fotografías que la joven tomaba a las paredes de su dormitorio.
Del nombre del edificio, la creencia popular sostiene que es porque uno de los torreones tiene la forma cónica del sombrero de una bruja; acompañada por ventanas posicionadas de forma tal que asemejan un rostro. Aunque no es difícil encontrar a alguien que explique que el nombre del edificio surge por que en su interior se reúne un aquelarre de brujas en ciertas noches.